Revolución de Davos: sentimientos radicales
La disrupción y la desorientación conceptual golpeó fuerte al Foro Económico Global de Davos. El abogado, escritor y profesor de marketing Tim Wu (autor de destacados ensayos sobre el mercado de la atención y las empresas de internet) escribió el viernes en The New York Times: "La revolución llegó a Davos: en el evento capitalista anticapitalista irrumpieron sentimientos radicales". En los manifiestos y las declaraciones colectivas oficiales del evento fundado por Klaus Schwab abundaron el llamado por la urgencia ambiental y las pretensiones humanocéntricas.
Pero en las convocatorias paralelas emergen las paradojas: el billonario Marc Benioff fue anfitrión de un evento en el que el músico pop Will.I.Am propuso reemplazar el modelo basado en el capital por el "talentismo" [sic], mientras que un grupo de teenagers aspirantes a Greta Thunberg se despachaban: "Antes en este lugar eran todos hombres blancos, viejos y ricos". Parafraseando a Henry Ford, el capitalismo es el sistema en el que uno puede elegir el modo de oponerse que prefiera siempre que sea desde dentro del mismo.