Cantineras invitadas

Hace algunas semanas atrás fuimos invitadas por un bar de nuestra ciudad para crear nuestro propio coctel y prepararlo para quienes se acerquen a cenar o a beber. Fue una experiencia muy divertía y distinta; jugar a estar del otro lado de la barra; ver cómo ven aquellos que noche a noche disfrutan de servir brebajes a quienes se acerquen a su barra.

¿El nombre? Como comunicadoras que somos, éste surgió fácil al recordar los años y la insistencia en citar la fuente y el valor de esa información que sabíamos que era segura pero que teníamos que respetar la confidencialidad y el compromiso con nuestro informante. Nuestros trago “Off the record” estuvo en la carta sólo por esa noche y tenía algunos de nuestros elementos preferidos en su justa medida combinando colores y texturas. Vodka, vino rosado, almíbar de lemongrass, jugo de lima y láminas pepino estaban entre sus ingredientes. Como toque final, zarzamora, que además aportaba color en contacto con el líquido que ya se encontraba en el vaso. La receta puede sonar extraña, pero ¡estaba riquísimo! Y todos los que lo ordenaron quedaron súper contentos con él.

Como era una experiencia nueva y distinta en nuestro día a día, elegimos jugar con los componentes de nuestros conjuntos, sumando elementos sencillos y simples con accesorios y zapatos que rompan la estructura del mismo; para armar una vestimenta que trascendiera aquello que usamos habitualmente para otras ocasiones. La ambientación del bar y su barra jugaron, también, un rol principal en todo el contexto que rodeaba este evento.

Te contamos un poco qué elegimos para llevar puesto en esta oportunidad…

LULI

Como ya comenté en otras oportunidades, los accesorios suelen ser protagonistas en mis conjuntos y esta me pareció una oportunidad perfecta para sumar algunos bastante particulares. Las prendas que elegí son bien sencillas, jean tiro alto y remera básica blanca; nada que distraiga o que aporte demasiada información. Los zapatos, también altos, acompañan perfectamente en color nude.

La información del conjunto está dada por este top de cadenas, que es un elemento ideal para darle un toque diferente a lo que vayas a usar; resuelve en un minuto la clásica pregunta ¿qué me pongo?

Como detalle final, agregué un sombrero de raffia con apliques, que también es perfecto para los días de verano que ya se instalaron.

LOLA

Un vestido negro corto es ese básico que hace siglos que escuchamos que tenemos que tener, y el tiempo sigue demostrando que es así. Para esta ocasión yo reversioné éste, no tan básico como los demás pero ideal para jugar con las sutilezas de su escote de costado al que algunos denominaron “side boobs”.

“Pechera metálica, dícese de esos ornamentos capaces de añadir personalidad a cualquier look” y así es como este look es llevado un poco más allá de lo clásico, gracias a este accesorio que va más allá de lo convencional.

La idea era estar cómoda y yo sigo obsesionada con ponerme bolcegos tanto con vestidos como con short de jean, así que no dude en seguir cortando un poco más con el estilo del vestido para poder lograr un look más reo pero delicado a la vez.

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Fotos: Juanjo Jonás Duarte

Agradecimiento especial: Chinchibira Bar

Pechera y body chain: Universo Actis

Zapatos Luli: Rubén Zapatos