Personalizá tu experiencia

Hace tiempo que intentamos que cada cosa que hacemos sea una experiencia, que nos sume y nos aporte a nuestras vidas. Desde nuestro trabajo hasta el ocio; pasando por las compras o las cosas que consumimos. No somos las únicas, por eso, cada vez más marcas o servicios entienden este concepto y tratan de modificar sus costumbres con los consumidores y también, con sus empleados. Claro que no es aplicable a todo lo que hacemos en nuestras vidas, pero está bueno intentarlo con la mayor cantidad de actividades o acciones que emprendamos. Nos da sensación de paz y de tiempo bien invertido; por otra parte nos aleja del frenesí diario que generaciones anteriores impusieron como “tiempo productivo”.
Así es como decidimos tomarnos un tiempo para mimarnos y relajarnos ¿qué mejor que hacerlo en un spa? Cuando perdemos el eje o nos dejamos chupar por los avatares de la vida diaria está bueno frenar, relajarse y pensar qué es lo que queremos; entendemos que este es uno de los mejores marcos para hacerlo. Además, para que la experiencia sea completa podemos optar por pasar el día dentro del complejo.


Hoy claramente no proponemos conjuntos, sino que decidimos representar el valor de los objetos personalizados. ¿Cuál es el valor de tener una prenda o algún objeto personalizado? Lo más importante es que ha sido creado para nosotros, por tanto es exclusivo; más allá de que la prenda sea igual; tiene un trabajo agregado y artesanal que es único. La mayoría de las veces hay varios motivos, tipografías, símbolos o colores para elegir, por tanto, la elección y combinación de esos factores será tan personal como quién la elige. Por otra parte, también existen prendas donde lo exclusivo tiene que ver con los géneros o estampados que se utilizan, muchas veces algunas marcas ofrecen este servicio a sus clientes; sobre todo emprendedores o diseñadores independientes.
Fuimos por este camino y decidimos personalizar lo que llevábamos…
LULI

La romántica que hay en mí afloró cuando vi estos diseños…moños, flores y corazones en diferentes tonos de rosa que es el color protagonista. A mí, particularmente, me relajan estos tonos y más cuando se combinan con el blanco, que es el clásico que mejor se lleva para una tarde de relajación.



Respecto de la malla elegí un estampado floral donde el azul y verde predominan con toques de rojos y naranjas que realmente me encanta; en la pieza de abajo de la malla opté por un tiro extra alto, algo que desde el verano pasado es tendencia en trajes de baño y ayuda a estar más cubiertas; y en la parte de arriba el típico trinagulito que nunca pasa de moda.
LOLA




Para mí no hay nada mejor que salir de la ducha en bata, soy de las que realmente la usan, y si bien en este caso la lleve al día de spa, generalmente trato de salir de la ducha, ponerme la crema y en bata tirarme en la cama a leer un ratito y desconectarme del trajín del día.

Hace años que personalizo toallas y batas en casa, y lo bueno es que cada uno elije su estilo y lo que lo representa. Tanto mi bata como mi turbante están bordados con labiales y frascos de perfumes de distintos tamaños porque son mis objetos fetiches.
Elegí un traje de baño bien llamativo en su modelo triagulito y me dedique a disfrutar en la pileta climatizada al aire libre con una magnifica vista al río.
¿Cuáles son sus rituales para relajarse?¿Utilizan objetos personalizados?
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Fotos: Juanjo Jonás Duarte
Agradecimiento: Puerto Norte Design Hotel
Batas y Cofias: Manos Mágicas Bordados / Mallas: Tienda Naked