Lázaro Báez se negó a ser trasladado al juicio y se dilata su indagatoria

Lázaro Báez coquetea con la Justicia: avanza y retrocede. Por segunda vez, el empresario dueño del Grupo Austral se negó a ser trasladado desde el penal de Ezeiza a los tribunales de Comodoro Py, donde debía declarar en el juicio oral de la causa conocida como la "ruta del dinero" en la que se lo investiga por lavado de dinero.

El Tribunal Oral Federal N 4 (TOF 4) le volvió a fijar la fecha de la indagatoria para el miércoles próximo. Si Báez, que se encuentra involucrado en otros expedientes judiciales junto a la expresidenta Cristina Kirchner, habla ante la Justicia para defenderse de la acusación en su contra, lo hará después de las elecciones.

A Báez y sus hijos se los investiga por el lavado de 60 millones de dólares. El empresario santacruceño nunca declaró en este juicio, que comenzó hace un año, pero el mes pasado su defensa transmitió a los jueces del Tribunal Oral que ahora sí estaba dispuesto a hablar.

La semana pasada se negó a ser trasladado y su abogada, Elizabeth Gassaro, le transmitió a los jueces del Tribunal Oral Federal N° 4 que su cliente quería esperar y declarar "después de los testigos y los demás imputados". El presidente del TOF, Néstor Costabel, le respondió a Gassaro el miércoles pasado que si Báez quería prestar declaración indagatoria y defenderse de la acusación, debía hacerlo en la audiencia de hoy, donde, una vez más, estuvo ausente.

Leonardo Fariña sí declaró la semana pasada. Fariña, señalado como uno de los valijeros, dijo que esperaba la declaración de Báez con ansiedad. En más de una oportunidad Fariña sostuvo que respondió a las órdenes de Báez para proceder con las maniobras financieras que hoy están bajo la lupa de la Justicia.

La actual defensa de Báez está integrada por un grupo de abogados que, en 2016, asesoraron a Fariña. Esta causa tiene un frente oral y público, que se deja ver los miércoles en las audiencias orales, y una trastienda: los abogados de algunos acusados tienen un rol activo en otras causas, como la que tramita en el juzgado federal de Dolores, conocida como el caso D'Alessio y en la que se investiga una trama de supuesto espionaje ilegal.