Cinco gobernadores criticaron a Rodríguez Larreta y tomaron postura en la pelea por las clases presenciales

Las silenciosas gestiones de distintos ministros -Eduardo de Pedro y Gabriel Katopodis fueron los más activos- dieron sus frutos. Cinco gobernadores dieron hoy al presidente Alberto Fernández su público respaldo a las restricciones tomadas el miércoles pasado, incluida la suspensión de clases presenciales, foco de conflicto con la ciudad de Buenos Aires que encabeza Horacio Rodríguez Larreta.

Axel Kicillof (Buenos Aires), Omar Perotti (Santa Fe), Sergio Uñac (San Juan), Alicia Kirchner (Santa Cruz) y Omar Gutiérrez (Neuquén) también cuestionaron, cada uno con su estilo y sus modos, la decisión del jefe de gobierno porteño de acatar el fallo de la justicia porteña que ordenó la continuidad de las clases presenciales a pesar del decreto presidencial, una medida que el Gobierno ya apeló ante la Justicia federal y que espera revertir en los próximos días.

“No hagamos política con la pandemia, estamos condenando a argentinos y argentinas. Que se carguen en su conciencia los que actúan de ese modo”, dijo el Presidente en el acto en el Museo del Bicentenario en el que se anunciaron obras de infraestructura para combatir la pandemia y un bono de $6500 pesos por tres meses para el personal de salud.

Antes de su discurso, y en un acto “bastoneado” por el ministro de Obras Públicas, los mandatarios provinciales expresaron vía zoom su apoyo a las medidas y dejaron críticas hacia su colega porteño. “Esperemos que la política de coordinación en el AMBA tenga éxito como al principio de la pandemia”, dijo el peronista Perotti, y recordó que los contagios comienzan en la zona metropolitana y “pasan” al resto del país.

Luego de Perotti, fue Uñac quien combinó respaldos con estiletazos hacia el jefe de gobierno porteño. “El diálogo tiene que ser ese punto de encuentro”, afirmó, y pidió “respetar las medidas, vivir en un Estado de Derecho, respetar las reglas de juego”.

Tan previsible como esas críticas fue la de Alicia Kirchner, quien luego de transmitirle al Presidente su “alegría” por su recuperación luego del contagio de Covid, afirmó que “los derechos individuales tienen un límite cuando se afecta el derecho colectivo”. La gobernadora patagónica le contó al Presidente que en Santa Cruz “hay clases dónde no hay circulación del virus” y que están suspendidas en las localidades que sí lo tienen. “Miremos a la Argentina federal, no solamente desde nuestro lugar”, afirmó.

Invitado en un contexto de mandatarios peronistas, Gutiérrez agradeció el “trabajo en equipo” con el Gobierno en el combate a la pandemia, y destacó que “los consensos son muy importantes, así lo estamos haciendo en la Patagonia. Hoy no tenemos segunda ola, y queremos seguir así”, destacó. También habló de los “fallos a medida de autoridades locales”, en clara referencia al fallo de la Cámara de Apelaciones porteña que ordenó la continuidad de las clases. Pareció una “devolución de gentilezas” de Gutiérrez, enojado por un reciente viaje del ministro de Ambiente porteño, Eduardo Macchiavelli, en el que criticó al MPN, el partido que gobierna la provincia desde 1958 y que integra el gobernador neuquino.

El ataque de Kicillof

En sus trece minutos de discurso, Kicillof la emprendió sin sutilezas y de manera directa contra Larreta. “Es repugnante que se utilice a la Justicia para perjudicar a los que tienen que ser cuidados”, dijo el gobernador, y destacó que en su gestión “preferimos ser antipáticos con algunos, antes de hacer política con la muerte”, dijo el gobernador. Su discurso fue en línea con el del Presidente, quien luego de pedir “no hacer política con la pandemia” recordó que Buenos Aires, Santa Fe y San Juan “son las provincias que más docentes han vacunado”, y que la ciudad de Buenos Aires marcha “anteúltima” en ese ranking, con el 14 por ciento de sus maestros inmunizados.

“Larreta se equivoca, no se puede especular y pensar en las elecciones”, afirmaban desde un despacho de Balcarce 50 en defensa de los argumentos del Presidente, y adivinando el impredecible final de la película. “Van a ver, al final va a quedar Alberto como el que consigue vacunas, y la oposición como la que tira piedras”, destacaban en otro despacho importante, mientras la Corte Suprema se involucraba de lleno en la resolución del entuerto por las aulas abiertas en la ciudad.

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