Coimas en el Senado: tras la absolución, Fernando De la Rúa denunció un "complot" y Mario Pontaquarto mostró su decepción

A trece años de que se desatara el escándalo y a diez años de la "confesión" la Justicia absolvió hoy a el ex presidente Fernando De la Rúa y a los otros siete acusados en la causa por las coimas en el Senado. Mientras que el ex presidente manifestó que la sentencia "reivindica" su "dignidad", el "arrepentido" ex secretario parlamentario Mario Pontaquarto manifestó su indiganción y dijo que la decisión judicial fue una "vergüenza".

Así lo determinaron los jueces del Tribunal Oral N°3, Miguel Pons, Guillermo Gordo y Fernando Ramírez, que consideraron que no se probó el presunto pago los $5 millones de pesos para la aprobación de la ley de reforma laboral ni la reunión en la Casa Rosada donde, según la acusación, De la Rúa autorizó el pago de coimas con la frase: "Eso arréglenlo con De Santibañes".

Tras oír durante 14 meses de juicio a 300 testigos, el fallo también benefició al ex secretario de inteligencia, Fernando de Santibañes; el ex ministro de Trabajo, Alberto Flamarique y a Pontaquarto, así como a los ex senadores justicialistas Augusto Alasino, Remo Constanzo, Alberto Tell y Ricardo Branda.

De la Rúa leyó una declaración al salir de los tribunales de Comodoro Py, tras conocer el fallo absolutorio. "Todo fue una infamia de principio a fin y de hecho no existió", afirmó el ex mandatario a la prensa.

"Casi 300 testimonios demostraron la inexistencia de toda sospecha de corrupción durante mi gobierno y puso en claro la verdad", señaló ."Todo fue una infamia de principio a fin y de hecho no existió, fue el punto de partida de un complot", dijo el ex presidente.

Fallo "vergonzoso"

Al leer su sentencia, el Tribunal Oral Federal 3 consideró que los sobornos a senadores para aprobar en 2000 la ley de reformar laboral "no existieron", y calificó de "embaucador" al arrepentido Mario Pontaquarto.

"La prueba producida en el debate y las demás constancias del proceso permitieron acreditar, sin lugar a dudas, que los hechos imputados a lo largo de este proceso no existieron", consideraron los jueces.

La causa se había iniciado cuando el ex secretario parlamentario Pontaquarto confesó que retiró de la ex SIDE dos bolsos con cinco millones de pesos/dólares para pagar sobornos a senadores para que aprueben en abril de 2000 la ley N° 25.250 de flexibilización laboral y que las coimas fueron autorizadas por De la Rúa en una reunión en Casa de Gobierno.

Pontaquarto, quien se había autoincriminado como el que repartió dinero entre senadores del Partido Justicialista consideró que el fallo de la justicia "fue vergonzoso", sostuvo que la resolución del tribunal "le hizo mucho mal a la justicia" y destacó que los magistrados "tenían la oportunidad de hacer un fallo ejemplar".

Escándalo en Comodoro Py

En la sala de Comodoro Py, apenas se conoció el fallo, el ex senador del PJ Augusto Alasino le pegó un cachetazo al "arrepentido" Mario Pontaquarto.

Al finalizar el veredicto en el juicio por las coimas en el Senado, en la sala de Comodoro Py, Alasino se retiraba se la sala y al pasar al lado de Pontaquarto le pegó una cachetada. "Puto, cagón, gil, vení", le gritó Pontaquarto a Alasino, mientras se retiraba de la sala.

El arrepentido quiso ir a buscar a Alasino pero fue impedido por sus abogados y otras personas y anunció que hará la denuncia penal contra el ex senador.

Al termino de la audiencia, Pontaquarto se refirió al tema ante los periodistas al señalar: "Alasino se acercó y me tiró una cachetada. Su mayor virtud es la cobardía".