Juntos por el Cambio rechazó en Diputados el nuevo blanqueo de capitales que impulsa Sergio Massa, pero el oficialismo aprobó el dictamen
La bancada opositora no está dispuesta a darle esta herramienta a dos meses de las elecciones; dice que la medida es un parche fuera del marco que requiere un reforma tributaria
LA NACION
Luego de rechazar, por electoralistas, las medidas que anunció el Ministerio de Economía para paliar los efectos de la última devaluación, Juntos por el Cambio le hizo otro desaire al ministro y candidato oficialista Sergio Massa. Esta tarde, en la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados, rechazó el proyecto de blanqueo de capitales que, por pedido de Massa, el oficialismo pretende apurar antes de las elecciones.
Pese al rechazo opositor, los representantes del Frente de Todos aprobaron el dictamen, que quedó así listo para ser debatido en el recinto. El jefe de la bancada, Germán Martínez, planea convocar a sesión especial para el 13 del mes próximo.
Los opositores no solo están en desacuerdo con varios puntos del proyecto; desconfían, además, del ministro Massa y no quieren concederle una herramienta tan gravitante un blanqueo de capitales cuando faltan solo dos meses para las elecciones generales.
“Este proyecto entra en un momento de crisis, en el final de un gobierno, sin un marco de reforma tributaria. Es un ejemplo más de la política del parche, siguen buscando soluciones de corto plazo que patean el problema para adelante”, anticipó la diputada Germana Figueroa Casas (Pro), la voz cantante de Juntos por el Cambio en este tema.
“En la letra chica del proyecto queda claro que se beneficia exclusivamente a los que están fuera de la ley y no a los que cumplen -agregó-. No se contemplan beneficios para los contribuyentes que están al día y tampoco se acompaña con una moratoria a aquellos que venían cumpliendo y quizás hoy enfrentan problemas económicos y necesitan reestructurar sus deudas. Es una ley injusta que refuerza la cultura de la evasión”.
El proyecto propone un blanqueo voluntario de capitales para bienes situados en el país o en el exterior durante un período de 360 días corridos desde la entrada en vigencia de la ley. Los bienes comprendidos serán la tenencia de moneda nacional y extranjera, activos financieros, bienes inmuebles, bienes muebles y créditos, y podrán acogerse tanto personas físicas como jurídicas.
Según la iniciativa, quienes blanqueen sus tenencias pagarán un impuesto que va del 5% al 20% del total declarado, según la celeridad con la que se haga la declaración. Asimismo, contempla una alícuota diferencial (más alta) para los bienes situados en el exterior. Asimismo, se crea un “Régimen simplificado de declaración” con una alícuota especial del 1,5%, aplicable a personas humanas que exterioricen tenencia de moneda nacional y/o extranjera y el monto no supere el 35% de los ingresos anuales promedio de los últimos tres períodos fiscales y con un tope de hasta US$50.000.
Desde el oficialismo, los diputados Marcelo Casaretto y Carlos Heller -este último presidente de la comisión de Presupuesto- señalaron que este blanqueo le permitirá a un vasto abanico de contribuyentes regularizar sus bienes no declarados antes de que se haga plenamente efectivo el Acuerdo Fatca suscripto entre nuestro país y los Estados Unidos.
Este acuerdo de intercambio de información financiera le permitirá a nuestro país recibir información sobre las cuentas bancarias que los argentinos hayan abierto en el país del norte, y viceversa. Según estimaciones del Ejecutivo, allí se encontrarían refugiados alrededor de US$100.000 millones sin declarar.
“Este blanqueo le dará la posibilidad los que tienen activos no declarados a regularizar su situación con el pago de un impuesto que es reducido en un principio y luego se acrecienta con el paso del tiempo. El objetivo es que ingresen voluntariamente; de lo contrario, el Estado se verá obligado a litigar contra esos contribuyentes una vez detectados”, sostuvo Casaretto.
Por su parte, el diputado Heller cuestionó tácitamente los reproches de la oposición al destacar que este proyecto, de aprobarse, le permitirá al próximo gobierno contar con una herramienta eficaz contra la evasión fiscal.
El legislador estimó en US$435.000 millones el monto de bienes de argentinos no declarados en el país y anticipó que, con el intercambio de información acordado con Estados Unidos, el Estado podrá perseguir económicamente a quienes no ingresen en el blanqueo. “Este es un proyecto que hace al interés nacional”, cerró.
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