Los legisladores oficialistas exigen que la Corte ponga en funcionamiento el Consejo de la Magistratura

Los bloques legislativos del Frente de Todos realizaron una enfática defensa de Cristina Kirchner, luego de que fuera condenada por corrupción en la causa Vialidad, y pidieron una reunión con carácter de urgente con la Corte Suprema de Justicia para exigirle que “arbitre los medios necesarios para la completa integración del Consejo de la Magistratura”.

Lo hicieron en una conferencia de prensa conjunta en la que cuestionaron en duros términos a la Justicia, a la que acusaron de estar en connivencia con poderes económicos y políticos para perseguir al peronismo y a la vicepresidenta, y en la que volvieron a la carga con la denuncia del viaje que cuatro magistrados y funcionarios políticos ligados a Horacio Rodríguez Larreta realizaron a Lago Escondido pagados por un grupo empresario.

“No existe más Poder Judicial de la Nación, fue reemplazado por una verdadera mafia judicial que es empleada de los intereses económicos más grandes que tiene el país”, denunció la senadora Juliana Di Tullio (Buenos Aires), presidenta del bloque Unidad Ciudadana, uno de los dos sectores en que se dividió en abril último el Frente de Todos de la Cámara alta para poder quedarse con un escaño extra en el Consejo de la Magistratura,

Además de repetir las denuncias formuladas ayer por Cristina Kirchner, los legisladores oficialistas le pidieron a la Corte Suprema una reunión para exigirle que resuelva el conflicto que mantiene empantanado al Consejo de la Magistratura.

Según explicó el presidente del bloque de diputados oficialistas, Germán Martínez (Santa Fe), la intención del encuentro es pedirle al tribunal respete los consejeros designados por ambas cámaras legislativas, pero también poner en marcha el organismo para iniciar el proceso de enjuiciamiento a los jueces involucrados en el escándalo del viaje al sur.

“Queremos dejar en claro que si la Corte Suprema ha tenido en un rol fundamental en el proceso de paralización del Consejo, ahora le caben los medios para que comience a funcionar” afirmó Germán Martínez, presidente del bloque oficialista de la Cámara baja, que estuvo acompañado en la conferencia por la diputada Vanesa Siley (Buenos Aires) y las senadoras Di Tullio y Lucía Corpacci (Catamarca).

Sin embargo, Martínez no hizo mención alguna a la nota por la que la presidenta de Diputados, la massista Cecilia Moreau, le comunicó a la Corte Suprema que dejaba en suspenso la designación de los cuatro representantes elegidos por los bloques de la Cámara baja.

Martínez aclaró que la normalización del Consejo de la Magistratura debe hacerse, pero “no de cualquier manera”. En ese sentido, la nota elevada al tribunal destaca que la integración del organismo tiene que ser “conforme a lo expresado por nuestra Constitución Nacional, el marco normativo vigente y la autonomía de los cuerpos legislativos para tomar sus decisiones”.

Aunque no lo expresaron de manera abierta, los legisladores oficialistas vuelven a la carga para presionar al máximo tribunal para que le tome juramento al senador kirchnerista Martín Doñate (Río Negro) como representante por la tercera minoría de la Cámara alta.

La designación de Doñate, avalada en la última sesión del Senado por el oficialismo y sus aliados ante la ausencia en el recinto de toda la oposición, se encuentra objetada ante la Justicia por el Pro, que propuso para ese sitial al cordobés Luis Juez.

De esta manera, el kirchnerismo repitió el escenario registrado en abril, cuando Cristina Kirchner ordenó dividir el bloque del Frente de Todos para quedarse con tres de los cuatro escaños que el Senado tiene en el Consejo de la Magistratura. En aquella oportunidad la vicepresidenta también había designado a Doñate, a pedido del recientemente creado bloque de Unidad Ciudadana, desairando las pretensiones de Pro, que quería a Juez en ese lugar. El cordobés fue a la justicia y obtuvo un fallo favorable de la Corte. Pero la decisión llegó apenas diez días antes de que venciera el mandato en disputa. Ahora, el cargo en juego que vuelven a disputarse Doñate y Juez es por un período que vence en 2026.

En realidad, la normalización del Consejo de la Magistratura ocupó apenas una porción de la conferencia de prensa. Los legisladores oficialistas se preocuparon más por atacar al Poder Judicial y por replicar la defensa que formulara Cristina Kirchner en la tarde del martes, luego de que conociera la condena a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos por delitos de corrupción en denominada causa Vialidad.

“Eligen a la única dirigente de este país capaz de enfrentarse con los poderes económicos más grandes para defender los intereses del pueblo argentino”, dijo Di Tullio.

En ese sentido, y en alusión a los jueces que viajaron a Lago Escondido, la senadora aseguró que las denuncias por el malfuncionamiento del Poder Judicial exceden lo que en los medios, dijo, se califica como “la agenda judicial de Cristina Kirchner”.

“A partir de ayer la agenda de Cristina parece ser que no es la agenda judicial. Toda la sociedad argentina va a tener que hacerse cargo de este tema, que es la mafia judicial, la que decide sobre la vida, sobre ustedes, sus bienes y sus libertades”, remató Di Tullio.

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