Macri busca aprovechar las fugas en el FPV
Quiere dar señales a las pymes y las autopartistas para preservar empleo y garantizar la gobernabilidad
Tras la escalada judicial de los casos de corrupción, crímenes y narcotráfico que afectan a ex funcionarios de Cristina Kirchner , el gobierno de Mauricio Macri procura aprovechar la fragmentación del kirchnerismo para avanzar en la consolidación de una nueva base de gobernabilidad, fundada en un acuerdo con el resto del peronismo para sancionar las leyes.
El macrismo apunta a mejorar el diálogo con gobernadores y legisladores moderados del PJ y a aislar al bloque radicalizado y debilitado del kirchnerismo. La semana próxima el foco estará puesto en la Cámara de Diputados para lograr tres leyes clave: la de autopartes, la de pymes y la del Ministerio Público.
Las dos primeras buscarán asegurar la preservación del empleo en las pymes y en el castigado sector automotriz.
Serán días dedicados a la economía, en un contexto de alta preocupación en la Casa Rosada por los posibles efectos locales del triunfo del Brexit, la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea. El ministro de Producción, Francisco Cabrera, tiene previsto hacer fuertes anuncios de inversiones.
Pero Macri tiene la certeza de que, si bien la inflación puede ceder a fin de año, las mejoras económicas reales, la inversión y la creación de empleo, no llegarán hasta 2017. Cambiemos busca instalar, así, un relato propio para enamorar desde la política, según pudo saber LA NACION de fuentes oficiales.
"Hace dos semanas el peronismo nos complicaba las leyes, nos atacaban por las tarifas y el ajuste. Los casos de corrupción sacaron ese debate de la agenda y debilitaron al kirchnerismo, que con sus errores nos facilitó leyes importantes", dijo a LA NACION un allegado a Macri.
La estrategia será profundizar la polarización y marcar contrastes con el kirchnerismo, que sufrió fugas de diputados, senadores y dirigentes del Frente para la Victoria (FPV), por los avances en casos de corrupción. Y mejorar, a la vez, el diálogo con el peronismo moderado: gobernadores y legisladores.
El camino lo trazó ayer el ministro del Interior y Obras Públicas, Rogelio Frigerio, cuando esbozó algunas de estas ideas fuerza. "A muchos [peronistas] la obstrucción permanente [del kirchnerismo] les genera incomodidad", dijo a FM Concepto, según consignó la agencia DyN, como se informa por separado. Allí habló de un "cambio cultural", mensaje dirigido al kirchnerismo y al PJ.
El relato político que Cambiemos busca instalar es conferencias de prensa y no cadenas nacionales; justicia y prensa independientes contra aprietes a jueces, medios o periodistas; consensos en el Congreso antes que leyes a libro cerrado; gobernadores e intendentes socios políticos contra látigo y chequera; invitación a opositores en los viajes del Presidente en lugar de escraches a los opositores.
Traducido a la práctica, se procurará afianzar un esquema de gobernabilidad en la Cámara de Diputados con una masa crítica de 90 bancas de Cambiemos, 37 del Frente Renovador de Sergio Massa y 17 del Bloque Justicialista de Diego Bossio, que podría incrementarse en estos días con las fugas en el FPV.
El presidente de la Cámara baja, Emilio Monzó, y el jefe del bloque de Pro, Nicolás Massot, dialogan con esos bloques mientras Frigerio lo hace con gobernadores que son afines. En el Senado, el presidente provisional, Federico Pinedo, negocia con el jefe del FPV, Miguel Pichetto, que aisló a un puñado de kirchneristas y coordina leyes con Bossio y Massa, no con diputados del FPV de Héctor Recalde. Pinedo defendió incluso al senador Juan Manuel Abal Medina, que fue procesado por Fútbol para Todos. "Considero a @juanabalmedina un hombre honesto y sinceramente ocupado del futuro argentino", escribió en su cuenta de Twitter.
Las leyes que hace tres semanas eran frenadas en el Congreso comenzaron a agilizarse, aunque con reformas acordadas. El PJ en el Senado cajoneó, no obstante, la de acceso a la información. Pero se aprobaron las de los dos jueces para la Corte, el allanamiento al ex ministro y diputado Julio De Vido, el blanqueo de capitales, el arrepentido, la extinción de dominio, y hay acuerdo por la ley del Ministerio Público, la de reforma política y la de autopartes y pymes.
Muchas de ellas fueron redactadas por el massismo (pymes, extinción de dominio) o por el bloque de Bossio (autopartes). "No hay más leyes a libro cerrado", dicen en Balcarce 50. Cerca de Macri aseguran que la radicalización de Cristina Kirchner o de Diana Conti contribuyó para que los gobernadores cierren filas con Bossio y Massa: necesitan fondos y obras.
El foco económico es el empleo. El ministro Cabrera negocia con Colombia la exportación de automóviles y cerró anteayer un acuerdo con Brasil para mantener las mismas condiciones de comercio automotor desde hoy hasta 2020. La ley de autopartes dará beneficios fiscales a las terminales que aumenten el porcentaje de piezas producidas en el país y mantengan la plantilla de personal, mientras que la ley pymes prevé el alivio de la presión tributaria a las que inviertan.
Sin viaje para ver la final
- Si bien tenía reserva de pasajes para volar a Nueva Jersey y asistir hoy a la final de la Copa América, finalmente, por consejo médico, Mauricio Macri no viajará a los EE.UU. a ver el partido entre Argentina y Chile. El Presidente debe seguir una recuperación de varios días tras la artroscopía que se le practicó el jueves, por lo que estaba contraindicado un viaje extenso. En el entorno del Presidente confiaron que, de haber sabido que la intervención le impediría viajar, habría sido postergada hasta el lunes.