Monzó almorzó con Peña y pactó una tregua para quedarse "hasta fin de año"

No se trató, por cierto, de una reconciliación total, aunque sí tuvo características de tregua. El jefe de Gabinete, Marcos Peña , y el titular de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó , compartieron un almuerzo en la Casa Rosada que tuvo a Rogelio Frigerio como tercer participante y que sirvió para despejar los rumores de un portazo del bonaerense, alejado desde hace meses de la mesa de decisiones del Gobierno.

"Se queda en el Gobierno hasta el fin del mandato de Macri, no se va a ningún lado después de todo lo que se dijo", confirmó a la nacion una fuente del Gobierno cercana al jefe de Gabinete, embarcado en el objetivo de "cerrar filas" y aglutinar a todo Cambiemos en torno del objetivo común: la reelección del Presidente.

Cerca del titular de la Cámara baja -un cultor de la "rosca" política que Macri y Peña miran con recelo- precisaron que en la reunión se acordó el "plan de trabajo legislativo hasta fin de año". Habrá, admitieron, no más de tres sesiones hasta las PASO de agosto y con temas no conflictivos. Peña y Monzó también acordaron las próximas visitas del jefe de Gabinete al Congreso, en medio del debate electoral.

"La idea fue acordar un sistema de trabajo previsible de acá al final del mandato. No hubo más que eso", destacaron cerca de Monzó, y afirmaron que el bonaerense "sigue fuera" de las decisiones importantes, como la definición del vicepresidente o el "plan Y", en el que funcionarios de la provincia trabajan para que María Eugenia Vidal pueda ser a la vez candidata a gobernadora de Macri y de postulantes a presidente de Alternativa Federal como Sergio Massa, Juan Manuel Urtubey o Miguel Pichetto. "Es casi un asesor externo", ironizaban cerca del dirigente de origen peronista, que comenzó a ser mirado con desconfianza en el espacio luego de apostar por la candidatura a gobernador de Sergio Massa en 2015, una apuesta que Vidal sus principales colaboradores jamás olvidaron.

Aunque su relación con Monzó no es la mejor, Peña sorprendió al mencionarlo en la entrevista con Carlos Pagni en el programa Odisea, por LN+. Allí recordó que el antiguo armador de la campaña presidencial de 2015 "decía que la provincia no tiene un sistema de comunicación aislado de lo nacional; si hablamos de provincia hablamos de Nación".

En el Gobierno afirman que la tregua política con Monzó -que recibió "ofertas" para sumarse al PJ alternativo cuando se tensó su relación con Macri y en los últimos días, cuando se frustró de manera definitiva su asunción como embajador en España- es solo uno de los avances en el terreno de la consolidación del espacio. Mencionan el alineamiento de Elisa Carrió, que hace campaña por varios candidatos desde hace semanas, y la conformación de un sector del radicalismo "mucho más cerca" de la Casa Rosada. En ese contexto, en el Gobierno festejaron el triunfo del gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, en las elecciones legislativas y lo señalaron como "un ejemplo de que se puede estar cerca de Macri y ganar elecciones". Valdés y el titular del Comité Nacional, Alfredo Cornejo, pasaron por Balcarce 50. El primero de ellos se reunió con el Presidente, y el segundo, con Peña.

Irónicos, y dando por hecho que el ciclo de su jefe político en Cambiemos "está cerrado", cerca de Monzó aseguran que sigue en pie su idea de armar "una consultora política" con el titular del bloque de Pro en la Cámara baja, Nicolás Massot -que tampoco tendrá lugar en las listas para renovar su banca-, aunque ese proyecto deberá postergarse por un tiempo.