Solá: las idas y venidas de un candidato que ahora da pelea

LA PLATA.- La precandidatura de Felipe Solá por el Frente Renovador fue, literalmente, un constante ir y venir. En los primeros meses del año, a la fuerza que lidera Sergio Massa, todo parecía sonreírle. Tanto, que hasta llegó a haber una sobreabundancia de postulantes para distintos cargos, incluso para aspirar a la sucesión de Daniel Scioli.

Precisamente, ése fue el motivo por el cual el primero de abril pasado anunció su "indeclinable declinación" de su candidatura, en razón de la existencia de una "profusión" de aspirantes en ese espacio, que hace que no pueda "crecer" su postulación, en referencia, sobre todo, a Francisco De Narváez y Darío Giustozzi.

Sin embargo, el panorama comenzó a revertirse en el seno de la agrupación con un creciente éxodo de dirigentes. Hasta que el 5 de junio, De Narváez anunció que se retiraba de la contienda, al pretender, sin éxito, una alianza del FR con Pro.

Mientras tanto, Solá, que estuvo al frente del Poder Ejecutivo bonaerense entre 2002 y 2007, aseguraba que "no volvería a ser candidato". Es más, en aquel momento hasta se barajó la posibilidad de que Massa dejara de lado sus aspiraciones presidenciales, para pelear por la provincia.

Finalmente, después de tantas idas y venidas, el 20 de junio aceptó volver a postularse, ya como único precandidato del massismo, con la aspiración de volver a la Casa de Gobierno bonaerense, acompañado por Daniel Arroyo, experto en políticas sociales, politólogo con posgrado en Flacso y ex viceministro de Desarrollo Social en los primeros años de la presidencia de Néstor Kirchner. Hombre ligado al campo, Solá basó su campaña en su experiencia.

Eduardo D'Argenio