El espíritu otoñal del jardín, en la decoración de interiores
Dos propuestas para hacer con hojas que caen de los árboles o con flores marchitas y replicar dentro de casa el encanto natural y silvestre de la temporada.
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Los restos de poda del jardín, las ramas y hojas de los árboles que caen al suelo o incluso los frutos de la huerta pueden ser fuente de inspiración y convertirse en material para componer arreglos florales de estilo otoñal.
En esta época, la naturaleza despliega un abanico de colores que van desde el amarillo al rojo, pasando por naranjas, ocres, dorados, en fin, toda una gama de tonalidades que invita a llevar el encanto de lo silvestre al interior de casa.
Flores secas o varas recogidas de un baldío, una banquina o compradas en la florería: todo cuenta para que floreros y centros de mesa cobren un rol protagónico en la ambientación de los espacios. En esta nota, compartimos el paso a paso con dos propuestas sencillas de temporada.
Corona otoñal
Por María Gassiebayle
Materiales: 1 aro de mimbre o 2 o 3 ramas de glicina (Wisteria sinensis), cinta floral y piolín
Material vegetal: Hojas de liquidámbar (Liquidambar styraciflua) o alguna otra de color otoñal.
Procedimiento
- Entrelazar unas 2 o 3 ramas de enredaderas hasta formar la corona. Armar unos 30 ramitos de hojas de liquidámbar, tomándolas de los pecíolos.
- Unirlas con cinta floral para que quede el ramito armado.
- Disponer un ramito sobre el aro y darle dos vueltas de piolín.
- Colocar otro ramito y volver a dar dos vueltas de piolín. Seguir así hasta completar toda la corona.
- Disponer los ramitos de tal manera que vayan tapando los pecíolos de las hojas del anterior y que cubran la base del aro.
Un tip: Para la corona puede hacerse también una combinación de diferentes hojas de colores otoñales (robles, arce, tulipanero). Según la época del año también puede hacerse con hojas verdes.
Siguiendo la misma idea de la corona anterior y tomando un aro también como base, se puede hacer un centro de mesa otoñal.
En este caso se combinaron ramitos de hojas de otoño, ramitos de Verbena bonariensis seca y ramitos de espigas de Miscanthus gracillimus.
Se fueron colocando de a grupos y atando en el aro cada ramito individualmente. Para terminar, se apoyó la corona sobre una base redonda cubierta de musgo y se colocaron velas blancas en su interior.
Alma romántica
Por Camila Gassiebayle, de Blumm Flower Co.
Materiales: Copón de cerámica (de boca ancha), tijera, cinta floral, alambre de gallinero
Material vegetal: Peonías, cotinus, amapolas, cortadera (Cortaderia selloana); de florería o mercado: varas de lentejones, falso lino, yuyo poroto, tulipinas
Procedimiento:
- Realizar una “pelota” con el alambre de gallinero, colocar dentro del recipiente y sujetar con la cinta floral de manera transversal. Nunca deben verse el alambre ni la cinta.
- Insertar dentro del alambre las cortaderas, los pastos y las varas largas. Los elementos deben quedar estables. Estos definen la forma mariposa y la estética garden style.
- Trabajar un lado (el izquierdo, en este caso) como centro visual del arreglo, con peonías secas, cotinus y tulipinas.
- Colocar todos los demás elementos, acompañando y rellenando.
- Sumar las varas de amapolas para jugar con las alturas.
Mantené el arreglo en un espacio que no reciba sol directo. El sol reseca las flores y las hace más quebradizas. Es importante retirar el polvo que con el tiempo se puede acumular sobre el arreglo.
LA NACION
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