Rosario: el Presidente se reunió con los padres del joven encontrado muerto en el río
ROSARIO.– El presidente Alberto Fernández recibió a los padres de Carlos Orellano, cuyo cuerpo fue encontrado ayer en el río Paraná. Más de mil vecinos se habían movilizado desde el mediodía para exigir que se investigue la presunta participación de patovicas y policías en la muerte de ese muchacho de 23 años. Orellano había desaparecido en la madrugada del lunes pasado, momentos después de un incidente en el que habría participado dentro del boliche Sr. Ming, ubicado a solo 100 metros del Monumento a la Bandera. El Presidente encabezará allí un acto por el 208° aniversario de la primera vez en que fue izado el estandarte nacional.
El cuerpo de Orellano fue encontrado en esa zona en la tarde de ayer, por lo que hoy sus familiares y amigos llevan adelante una movilización en pedido de Justicia. Trascendió que el presidente Fernández recibió a los padres durante unos 15 minutos.
Un día después de que personal de la Prefectura Naval encontrara en el río Paraná el cadáver de Carlos Orellano, el municipio clausuró de manera preventiva por 45 días el boliche Sr. Ming, situado en la estación Fluvial de Rosario.
La medida fue adoptada hasta que los fiscales a cargo de la investigación determinen, como denuncia la familia de la víctima, si un grupo de patovicas, con la connivencia de policías, golpearon al joven que después desapareció y fue hallado en el río.
Mientras avanza la autopsia, que será realizada bajo el llamado protocolo de Minnesota, debido a que podría haber fuerzas de seguridad implicadas, familiares y amigos del joven se concentraron en la estación Fluvial, en la puerta del boliche, para reclamar justicia.
Edgardo Orellano, el padre del joven que apareció muerto, volvió denunciar ante los medios las "graves irregularidades" que hubo en la investigación por la desaparición del joven y apuntó a personal de seguridad privada del boliche y a policías adicionales que se encontraban trabajando en ese momento.
En el caso actúa un plantel numeroso de fiscales, como los de Homicidios Dolosos, Patricio Saldutti y Adrián Spelta, y de Homicidios Culposos, Valeria Piazza Iglesias, y también el titular de la fiscalía de Violencia Institucional, Gonzalo Fernández Bussy, quien se ocupa de indagar sobre la demora en las actuaciones policiales tras la desaparición del joven el lunes a la madrugada.
La familia del joven desaparecido enfrentó además problemas para realizar la denuncia en la comisaría 2a, situada en el centro de Rosario.
Un punto polémico de la investigación es que no se pudieron obtener las filmaciones de las cámaras de videovigilancia del lugar, ya que no quedan archivadas las grabaciones de las imágenes.
El cadáver fue divisado ayer a la tarde en el Paraná por una mujer, que avisó a la policía. Luego, la Prefectura Naval comenzó la búsqueda. El cuerpo fue encontrado a unos metros de la estación fluvial, donde se encuentra el boliche Ming, donde había asistido Orellano con sus amigos.
"La familia Orellano ha padecido una situación de graves irregularidades a partir de la denuncia. Habría habido alguna orden de fiscalía de intervenir y cautelar cámaras y esto no se habría producido. El boliche habría abierto el lunes, lo que implica una situación irregular tratándose de una denuncia de desaparición y del lugar donde ocurrió el hecho", sostuvo Salvador Vera, el abogado de la familia de la víctima.
Según el relato del padre del joven muerto, Orellano habría sido sacado del boliche de manera violenta por un grupo de patovicas y guardias de seguridad del boliche Sr. Ming, luego de que el joven de 23 años pretendiera ingresar sin permiso en el sector VIP.
De acuerdo a esta versión, avalada por testigos y amigos de Orellano, la paliza habría continuado hasta llegar fuera del boliche. En ese punto se manejan dos hipótesis sobre lo que ocurrió después: los propios patovicas empujaron al muchacho al río, o bien el joven cayó al agua por un golpe. También se habló de la participación o el encubrimiento de policías.
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