Engaño. Procesan a un joven que, siendo Covid positivo, viajó de Córdoba a Mar del Plata con los papeles de un amigo para visitar a su novia
El 22 de junio, cuando en Mar del Plata se extremaban los recaudos para evitar el ingreso del coronavirus a la ciudad, los agentes municipales detuvieron la marcha de un vehículo en el retén de la ruta 226. El conductor les dijo que provenía de Córdoba y que llegaba para "cuidar a un familiar". Presentó la documentación del auto y la declaración jurada excepcional para circulación de emergencia sanitaria, en la que constaba que iba a atender a una señora mayor. Para poder pasar y evitar el aislamiento de 14 días, aceptó someterse a un hisopado en un laboratorio privado y aguardar el resultado en el domicilio de la persona a la que iba a asistir.
Pero muy pronto el resultado del test reveló el engaño y el peligro en ciernes: cuando llamaron al paciente para informarle que había dado positivo para Covid-19, quien atendió dijo que estaba en Córdoba y que quien había llegado al partido de General Pueyrredón era, en realidad, un amigo al que le había facilitado el auto y, también, su identidad. El verdadero viajero no tenía que cuidar a un familiar: había hecho más de mil kilómetros para pasar el fin de semana con su novia en la zona de los Tribunales marplatenses.
Tres meses y medio después de la peligrosa imprudencia, la Justicia federal procesó tanto al joven que viajó para visitar a su novia como al amigo que le prestó el auto, el DNI, la licencia de conducir y la cédula verde del auto con el que cruzó medio país, contagiado de coronavirus.
Según informó el Ministerio Público Fiscal en su portal institucional www.fiscales.gob, el juez federal Santiago Inchausti, a instancias de la acción penal impulsada por la fiscal Laura Mazzaferri, los procesó como autor y partícipe necesario, respectivamente, de los delitos de violación de medidas sanitarias para impedir la introducción o propagación de una epidemia y falsedad ideológica de un instrumento público. Los embargó por un millón de pesos a cada uno y sostuvo el secuestro y decomiso del vehículo utilizado para llegar a Mar del Plata, "por ser instrumento del delito, pues sin él no se habría podido cometer". El auto quedó "a disposición de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, a fin de ser destinado según corresponda".
Quedó pendiente de resolución la situación procesal de la persona que alquiló, a través de una plataforma digital, el departamento en el que el principal imputado pensaba pasar unos días de vacaciones con su novia. "El juez difirió la resolución de su situación procesal ante lo informado por el Ministerio Público Fiscal sobre un posible acuerdo de reparación integral, conforme las nuevas formas de resolución alternativa de conflictos previstas en el Código Penal y el nuevo Código Procesal Penal Federal", se informó.
El magistrado consideró acreditado que el joven que viajó de Córdoba a Mar del Plata "cuando no estaba permitido hacerlo" sin un permiso y una justificación extraordinaria, e "hizo insertar datos falsos en una declaración jurada para obtener el certificado excepcional de circulación" y que "se identificó ante el personal de control sanitario, municipal, policial y personal del laboratorio" con el nombre de su amigo (con el nombre de su amigo)".
En cuanto al dueño del auto y de los documentos usados por el viajero, Inchausti señaló que el acusado principal había tenido "éxito" gracias "a la colaboración prestada" por su amigo, que había realizado "una prestación infungible sin la cual no se habría podido cometer el delito", ya que "le brindó toda la documentación necesaria para trasladarse, eludir controles y también el propio medio de transporte".