¿Homicidio o suicidio?: las claves del pedido para investigar a Nicolás Pachelo por la muerte de su padre

Roberto Pachelo fue uno de los fundadores del country Carmel. Murió el 10 de enero de 1996. Su cuerpo fue hallado con un balazo en la cabeza en la casa que había dentro del predio donde su familia tenía una tosquera, en Villa Rosa, en Pilar. El caso se investigó y se cerró como un suicidio. Pero, 26 años y nueve meses después, los fiscales que representan al Ministerio Público en el juicio por el homicidio de María Marta García Belsunce solicitaron la reapertura de la investigación y pusieron bajo sospecha a Nicolás Pachelo, uno de los hijos del empresario muerto.

La presentación de los fiscales Patricio Ferrari, Federico González y Andrés Quintana fue hecha ante el juez de Garantías de San Isidro Diego Martínez. El magistrado ahora debe resolver si hace lugar o rechaza la solicitud del Ministerio Público.

Pachelo murió el 10 de enero de 1996 entre las 6 y las 12. En la foja 56 del expediente se afirmó que el resultado del peritaje practicado “sobre los calcos parafínicos de las manos de la víctima de donde surge como conclusión que en las muestras correspondientes a ambas manos nose comprobó presencia de restos de deflagración de pólvora”.

Desde el 13 de julio pasado, Nicolás Pachelo, es juzgado por el homicidio de García Belsunce, ocurrido el 27 de octubre de 2002 en el country Carmel. El debate está a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N° 4 de San Isidro.

“En este debate [el juicio por el homicidio de García Beslunce], a lo largo de diferentes jornadas, se advirtió la existencia de diversos testimonios que guardarían relación directa e inmediata con el objeto procesal de la presente encuesta y que -en función del criterio de objetividad que rige la actuación de este Ministerio Público Fiscal- nos obligan a solicitar por medio del presente se reanude la instrucción de la presente”, explicaron los fiscales al fundamentar el pedido para reabrir la investigación por la muerte de Roberto Pachelo.

Según Ferrari, González y Quintana, en el juicio “se evidenciaron elementos de interés que ameritan -además de su evaluación en el propio debate citado- la reapertura de la presente investigación, dado que se verifican, a criterio de este Ministerio Público Fiscal, elementos suficientes para atribuir a Nicolás Roberto Pachelo la muerte dolosa de su padre Roberto Pachelo”, sostuvieron los fiscales en su presentación ante el juez Martínez.

Como pruebas surgidas en el juicio, citaron afirmaciones de ciertos testigos que declararon bajo juramento de decir la verdad, como el empresario Mariano Maggi, Michael Taylor, ahijado de García Belsunce, y Jaqueline Barbará, pareja de Roberto Pachelo.

“Maggi relató un llamada telefónica con Nicolás Pachelo donde el imputado le refirió en modo intimidante: ´si tuve los huevos de matar a mi padre, imaginate que matarte a vos o a tu vieja no significa nada´”, recordaron los fiscales en su presentación.

Taylor recordó un encuentro con Francisco Pachelo, hermano del imputado, donde le comentó que creía que a su padre lo había matado el acusado de asesinar a García Belsunce.

“Barbará dio cuenta de la mala relación entre Nicolás y Roberto Pachelo. Dijo que Roberto no quería que Nicolás viviera en la casa con él, cuando se encontraba en la tosquera de Villa Rosa. En relación, a las circunstancias relativas a su muerte, destacó que Nicolás volvió el 3 de enero de 1996 de los Estados Unidos y que Roberto Pachelo murió tan solo unos días después. En cuanto al día del hecho, manifestó que al ver el cuerpo sin vida observó que tenía un brazo levantado. Además, recordó que al entrar pensó ´lo mataron´. Agregó también que al llegar el padre de Roberto y abuelo de Nicolás y ver la escena, dijo ´este hijo de puta me lo mató´, en referencia a Nicolás Pachelo”, explicaron los fiscales al citar la declaración de la testigo.

Vigencia de la acción penal

Los fiscales explicaron que el caso debía prescribir a los 15 años de sucedido “pero quedó interrumpido en 2003, cuando Nicolás Pachelo cometió diferentes hechos de robos por los cuales fue condenado. Es decir, aplica al caso la causal de suspensión del curso de la prescripción. De tal modo, a partir de entonces, nuevamente comenzó a correr el curso de la prescripción, el cual se interrumpió el día 20 de diciembre de 2015, cuando cometió el delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización, por el cual fue condenado el 27 de febrero de 2019 a la pena de dos de cárcel”.

Los representantes del Ministerio Público afirmaron: “La acción penal se encuentra plenamente vigente”.

Ferrari, Quintana y González solicitaron una serie de medidas de pruebas y que, llegado el momento, sea indagado Nicolás Pachelo por el homicidio de su padre.