En octubre de 2006 murieron diez chicos del colegio de Villa Crespo en un accidente cuando volvían de Chaco de realizar tareas solidarias; la semana pasada el chofer del colectivo en el que viajaban fue condenado a tres años de prisión
Oscar Atamañuk había sido absuelto en 2009 por el juez Jorge Alberto Galbusera, a cargo del Juzgado de Primera Instancia del Distrito en lo Penal Correccional de Reconquista, Santa Fe. Sin embargo, una Cámara revocó dicha sentencia y ordenó un nuevo juicio.
El fatal accidente ocurrió el 9 de octubre de 2006 cuando el micro en el que viajaban los alumnos de Villa Crespo chocó contra un camión fuera de control en la ruta nacional 11, cerca de Margaritas, a 200 kilómetros de Santa Fe. Regresaban de Chaco, adonde había concurrido para realizar tareas solidarias en una escuela rural.
Los estudios de alcoholemia determinaron que el chofer del camión y su acompañante, que también murieron en el accidente, estaban ebrios.
Luego de la condena que recibió Atamañuk los familiares de los alumnos fallecidos mostraron su conformidad. Sergio Levin, papá de Lucas y fundador de la ONG "Conduciendo conciencia", manifestó: "Nosotros sabíamos que había culpabilidad. Había cometido maniobras que lo incriminaban", sostuvo.
"Creo que es una condena que coincide con los hechos y con lo que se puede esperar en materia penal", dijo a LA NACION Marcelo Parrilli, abogado de los familiares de la tragedia.
