Fuerte controversia por la señal de cable que lanza el gobierno porteño

Hasta ayer, la Ciudad contaba con una radio oficial y un presupuesto total de 10.900.809 pesos para difundir las actividades locales. A partir de hoy, el aparato mediático del Estado porteño agigantará su participación en el aire: a las 19, en el Centro Cultural San Martín, el jefe de Gobierno, Aníbal Ibarra, y el secretario de Cultura, Jorge Telerman, presentarán Ciudad Abierta, una señal de cable que se difundirá por el canal 80 de Multicanal, el 83 de Cablevisión y el 78 de Telecentro.

Según Telerman, la señal se utilizará para difundir actividades culturales y no para promover políticamente al gobierno. La oposición, de todas maneras, criticó la medida por "oportunista" y en muchos otros casos también por "innecesaria".

La controversia, básicamente, se centró en dos puntos:

• La posible utilización electoral de la presentación.

• La necesidad o no de que la Ciudad tenga una señal propia de TV.

"Este proyecto se elaboró cuando la fecha de las elecciones estaba fijada para el 8 de junio, por lo que quedan descartadas las intenciones proselitistas. Lo que cambió fue la fecha de las elecciones, no el proyecto", advirtió Telerman que, además de sus funciones en Cultura, comparte con Ibarra la fórmula de gobierno de Fuerza Porteña.

Disparen contra la TV

La oposición, sin embargo, recibió el argumento oficial con poca simpatía. El cineasta Ricardo Wullichszer, noveno candidato a legislador por Compromiso por el Cambio, habló en nombre del macrismo.

"No hay que salir a competir con los canales. Lo lógico sería articular los contenidos de la ciudad con la posibilidad de darlos en una señal existente", señaló.

Para la gente que apoya a Mauricio Macri, además, resulta "discriminador" este proyecto. "Se supone que está destinado a difundir actividades culturales, pero el mensaje llega sólo a quienes tienen TV por cable", se quejó Wullichszer.

Silvia la Ruffa, candidata a legisladora por Unión para Recrear Buenos Aires, se ocupó de defender la posición del sector que responde a Patricia Bullrich.

"En este momento, la Ciudad no necesita una señal propia. En un contexto de desempleo como el que vive la Argentina, destinar recursos a un canal de TV me parece un exceso", criticó.

Campaña encubierta

La Ruffa no sólo objetó la necesidad coyuntural de inaugurar una señal de cable, sino que también se mostró en contra de la oportunidad: "Podrían haberlo presentado dentro de un mes. Al hacerlo ahora, habilitan de manera encubierta una forma de financiamiento de la campaña, porque seguramente difundirán por esta señal todo lo que haga la Ciudad en actividades culturales".

Vilma Ripoll, candidata a jefa de Gobierno por Izquierda Unida, se mostró algo más flexible: "Depende de los fines que le den. Si lo abren a organizaciones culturales no oficiales, a los barrios y a los gremios, está bien. Ahora, si lo utilizan para publicidad política oficial, van a terminar inhabilitando la función original".

Cristian Caram, candidato a jefe de Gobierno por la Unión Cívica Radical, sostuvo su desacuerdo con que la Ciudad tenga una señal de TV. "Además, ya gastan demasiado en publicidad", disparó.

En el mismo sentido que Caram, allegados a Macri difundieron un estudio según el cual durante los primeros cinco meses de 2003 el gobierno porteño habría gastado en publicidad el 80 por ciento del monto destinado a todo el año.

"Entre televisión, radio, revistas y diarios, el gobierno porteño gastó 8.562.218 pesos. Para todo 2003, sumadas todas las áreas, tiene presupuestado 10.900.809 pesos para publicidad", sostuvieron dos de los más altos dirigentes de Compromiso para el Cambio. En el gobierno no respondieron sobre la veracidad de estos datos.

En cambio, ante las críticas de la oposición, Aníbal Ibarra respondió: "Este proyecto está alejado de cualquier propaganda política. Su esencia es difundir la extensa agenda cultural de la ciudad, tanto privada como oficial. Además, no significa ningún gasto extra, porque será financiado con el presupuesto previsto para Cultura".

El debate sobre la necesidad de que la Ciudad destine fondos (20.000 pesos por mes) a una señal de TV seguramente continuará. El de la publicidad oficial, también. Mientras, desde hoy, las emisoras de TV por cable porteñas contarán con una nueva señal. Ciudad Abierta llega a la Capital con una fuerte controversia detrás.

¿Sirve la TV oficial?

Patricia Bullrich

• No está definitivamente en contra de que la Ciudad tenga una señal propia, pero sí se opone a la oportunidad; ahora, entiende, no es el momento adecuado.

Vilma Ripoll

• Le parece bien que exista una señal de cable de la Ciudad, pero sólo si los gremios, los barrios y las organizaciones no oficiales tienen acceso a ella .

Mauricio Macri

• Prefiere que la oferta cultural se ofrezca mediante las señales y los canales ya existentes. Además, no está de acuerdo con difundir la información sólo por cable.

Cristian Caram

• Dice que la Ciudad no debería tener una señal propia. En cambio, sostiene que la información oficial debería promoverse desde los medios de comunicación privados.

Verificación

Gabriel Avruj, candidato a legislador porteño por el Partido por una República con Oportunidades, verificó ayer en la Legislatura la accesibilidad al edificio para personas discapacitadas motoras.

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