La salud del Papa. Qué es la bronquitis de base infecciosa que tiene hospitalizado a Francisco

El papa Fracisco padece una “bronquitis de base infecciosa”. Así lo confirmó el último parte médico, el cuarto desde que el Pontífice, que cumplió 86 años el 17 de diciembre pasado, debió ser internado ayer en el Hospital Gemelli tras sentirse mal después de la audiencia general en el Vaticano.

“En el ámbito de los controles clínicos programados para el Santo Padre, se detectó una bronquitis de base infecciosa que ha requerido la suministración de una terapia antibiótica intravenosa que ha producido los efectos esperados con una neta mejora del estado de salud. Sobre la base de la previsible evolución, el Santo Padre podría ser dado de alta en los próximos días”, dijo el director de la Sala de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni.

“Las bronquitis se refieren a inflamación bronquial. Pueden ser bacterianas o virales y la severidad del cuadro depende del huésped, es más grave en niños y ancianos. La presencia de comorbilidades (asma, Epoc, problemas cardíacos o renales) empeora el cuadro. El diagnóstico entonces depende de varios factores: la edad, comorbilidades, si es bacteriana o si es viral. Se realiza con una radiografía de tórax e idealmente con una tomografía en caso de internación”, sintetizó Alejandro Salvado (MN 79512), jefe de Neumonología del Hospital Británico.

Por su parte, la médica del servicio de Neumología del Hospital Alemán, María Eugenia Alais (MN 80229), graficó que se estima que el 5% de los adultos pueden llegar a tener algún episodio bronquial durante el año y agregó: “No necesariamente se necesita una enfermedad pulmonar previa. La etiología en general es viral y aumenta la frecuencia también por estación, ya sea en el otoño o en el invierno porque hay una mayor circulación viral en esas estaciones”.

“Las bacterias y los virus respiratorios son los microorganismos más frecuentes que pueden infectar el pulmón y causar neumonía”, coincidió Gabriela Claudia Tabaj (MN 107176), jefa de sala de Docencia e Investigación y coordinadora del consultorio de enfermedades Intersticiales Hospital A. Cetrángolo, de Vicente López. “Estas infecciones se pueden contraer por bacterias o virus respiratorios que viven en las fosas nasales (nariz), senos paranasales y boca que pueden propagarse hacia los pulmones; inhalación de microorganismos que pueden estar en el medio ambiente o que se pueden transmitir al inhalar gotitas en el aire, después de toser o estornudar una persona infectada y aspiración de alimentos, vómitos o secreciones desde la boca y que llegan hacia los pulmones”, detalló.

La bronquitis, entonces, puede ser viral o bacteriana. En el caso de las primeras, al igual que el resto de las enfermedades virales se transmiten por vía aérea. “Las bronquitis vírales solo requieren soporte: oxígeno, corticoides o broncodilatadores”, indicó Salvado como tratamiento. En tanto, en el caso de las bacterianas explicó: “Son bacterias comunes que en general nuestro organismo las rechaza y las combate, pero que, en alguien con alguna baja de defensas genera un cuadro infeccioso que requiere tratamiento con antibióticos. En general no son contagiosas porque son las mismas bacterias con las que convivimos normalmente. Las neumonías afectan el parenquima pulmonar, son más graves y requieren antibióticos”.

“No siempre es fácil hacer el diagnostico etiológico. Para los cuadros virales tenemos hisopados mediante los cuales se pueden detectar hasta 11 paneles de virus respiratorios. Los bacterianos se detectan menos del 50% como causa. En las neumonías identificar el germen no es lo habitual, la detección de antígenos virales es cara y no se hace de rutina”, agregó.

Los síntomas según coincidieron los especialistas son comunes a múltiples enfermedades: tos, fiebre, expectoración, ruidos respiratorios. “La tos es una tos de aparición aguda que puede persistir bastantes días, hasta tres semanas, y lógicamente va a empeorar en la medida que va avanzado el cuadro y persiste porque la bronquitis implica que hay una inflamación importante. En el 50% de los casos, el paciente expectora. Puede o no tener fiebre y puede tener repercusión general”, detalló Alais.

Y señaló: “En general el tratamiento es sintomático, al paciente se le pueden dar mucolíticos, antitérmicos. Hay un excesivo tratamiento de antibióticos en este tipo de bronquitis donde la mayoría de los casos son virales. Es difícil cuando uno tiene que tratarlos porque el paciente asume por la jerga general que debe recibir el antibiótico y es muy difícil explicarle que muchas veces no lo necesita. Lógicamente se les dan pautas de alarma, pero el tratamiento en realidad es sintomático”.