Pujas por la seguridad en el Aeropuerto de Ezeiza
Controversia entre los concesionarios y la Fuerza Aérea
La Policía Aeronáutica (PAN) y la empresa Aeropuertos Argentina 2000, que administra 33 aeroestaciones en todo el país, están enfrentadas por la seguridad en el aeropuerto internacional de Ezeiza.
El motivo de las disputas es que la PAN, que depende de la Fuerza Aérea, se siente presionada por lo que piensa que se trata de una maniobra para restarle poder en el control de Ezeiza, por donde circulan cargas y pasajeros.
"Esto preocupa a las autoridades aeronáuticas, sobre todo si se tiene en cuenta que los principales jefes de la organización armada que custodiaba al fallecido empresario Alfredo Yabrán y a su empresas se reagruparon y operaban bajo el nombre de Servicios Quality Control S.A, que realiza tareas de seguridad en Ezeiza y en Aeroparque", dijeron a La Nación fuentes judiciales.
El capitán de fragata (R) Adolfo Donda Tigel y los ex agentes del Servicio Penitenciario Federal Víctor HugoDinamarca, Roberto Naya y Carlos Orlando Generoso estuvieron vinculados con esa empresa, tal como lo informó La Nación en su edición del 2 de agosto último.
Fuentes del Gobierno dijeron a La Nación que éste enfrentamiento ya llegó a oídos del presidente Carlos Menem y de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE). Este organismo habría sido instruido para tomar los recaudos necesarios y evitar el descontrol de los accesos al país tanto de mercaderías como de pasajeros.
Otras fuentes aeronáuticas sospechan que este supuesto avance de Quality Control sobre la seguridad aeroportuaria se completaría con la incorporación, por parte de esa firma, de gendarmes retirados.
Se recuerda que la Gendarmería tuvo a su cargo, durante décadas, el control aeroportuario, hasta que en 1986 fue relevada en esa tarea por la PAN, lo que generó una situación de tensión entre ambas instituciones armadas.
Palabras cruzadas
El consorcio Aeropuertos Argentina 2000, que obtuvo la concesión de 33 aeroestaciones en licitación pública, es controlada por el empresario Eduardo Eurnekian mediante la Corporación América Sudamericana, poseedora del 35 por ciento de las acciones.
Hasta hace un poco más de un mes, la pugna entre los vigiladores privados de Quality Control y la Policía Aeronáutica se traducía sólo en esporádicas entrevistas en las que uno y otro sector se intercambiaban ácidos comentarios.
Pero desde el 10 de agosto último todo cambió. Comenzó entonces un un cruce epistolar que fue subiendo de tono.
En la primera misiva, el vocero de Aeropuertos 2000, ingeniero César Carabelli, pidió al Comandante de Regiones Aéreas, brigadier Enrique Dutra, "establecer de común acuerdo mecanismos a efectos de suministrar y recibir información de operaciones o acontecimientos", como la detención el 6 de julio último de un embarque de armas proveniente de Sudáfrica y dirigido a Perú, antes de que llegue a los medios de comunicación.
"Los mecanismos por implementar deberán tener en cuenta el principio de colaboración con las reservas que resulten necesarias, pero garantizando la inmediatez de dicho acceso a la información", señaló el vocero de Eurnekian.
La respuesta de la Fuerza Aérea no se hizo esperar y corrió por cuenta del jefe de la Policía Aeronáutica, comodoro Eduardo Perondi, que recordó a Aeropuertos Argentina 2000 que "la coordinación por ustedes peticionada a los efectos de recibir información previa a los procedimientos policiales (...) se halla limitada expresamente por el artículo 204 de la legislación adjetiva que prescribe el carácter de las actuaciones de secreto para los extraños al proceso judicial sustanciado.
"Asimismo, por la presente comunico a usted que, bajo ningún tipo de presión verbal o escrita, esta Dirección Nacional de Policía Aeronáutica transgredirá el principio jurídico esencial establecido en materia procesal que se denomina Secreto del Sumario", respondió el jefe aeronáutico.
La PAN se encargó de que copias de esas cartas, a las que tuvo acceso La Nación , les llegaran a jueces federales, camaristas y magistrados en lo penal económico. La intención habría sido la de ponerlos al tanto de una cuestión en la que eventualmente podrían llegar a intervenir por razones de jurisdicción.
Armas no
El cruce de cartas tuvo un segundo capítulo, y fue cuando Aeropuertos Argentina 2000 solicitó a la PAN que autorizara la portación de armas a sus guardias de seguridad privada en zonas de seguridad, aduana y salones de espera de Ezeiza. La dependencia de la Fuerza Aérea se negó en forma tajante.
El panorama de la seguridad en Ezeiza se complica si se tiene en cuenta que también presta servicios allí la firma Search (ver recuadro). Pero sus efectivos sólo pueden cumplir tareas disuasivas y preventivas, y su único armamento es un bastón.
Quality Control S.A, por su parte, custodia los servicios de rampa de la firma Intercargo, en manos del Estado, y da seguridad a varias aerolíneas.
Quality Control, cuya titularidad se le atribuyó a Alfredo Yabrán, hoy es controlada por el ex marino Donda Tigel.
Este último, junto con el penitenciario Dinamarca, fue acusado por Frank Holder, presidente de la agencia de seguridad de Edcadassa e Interbaires, del grupo Exxel, de haberse manejado con credenciales de acceso irrestricto en todo el aeropuerto.
Aeropuertos 2000 aclaró que Quality Control no presta servicios para ella en Ezeiza. Donde sí lo hace, dijo, es en el Aeroparque.
Fuentes del grupo de Eurnekian, consultadas por La Nación , negaron la existencia de tal conflicto y dijeron que su intención no es avanzar sobre las facultades de la Policía Aeronáutica en la aeroestación, si no evitar enterarse por los medios de sucesos relacionados con la aeroestación.