Bajo la superficie de Madryn
Salmones, meros y pulpos, entre otros, acompañan las inmersiones en la
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PUERTO MADRYN.- A 30 metros de profundidad, el Arca de Puerto Madryn, un cofre hundido en 1999 con diversos objetos y que se abrirá en 2100, tiene en una pequeña caja stanca, un libro de plástico para que los buzos que llegan a él dejen la firma que registra su visita.
Esto es sólo una muestra, porque si en la superficie de esta ciudad patagónica hay una multiplicidad de paseos, bajo las aguas del Golfo Nuevo, Madryn sigue siendo la Capital del Buceo Argentino.
Desde el clásico bautismo submarino hasta inmersiones más complejas, la excelente transparencia de este mar se suma a los innumerables atractivos del fondo, poblado de lugares naturales y de parques artificiales.
En los bautismos se puede bucear sin experiencia, ya que se hacen en lugares de escasa profundidad, de manera controlada, acompañado por un instructor. Después de una charla teórica sobre cómo es una inmersión, el operador proporciona el equipo básico y acompaña al turista.
A partir de los 4 m de profundidad y hasta los 10 -para fijar un tope accesible y sin complicaciones-, los aficionados al buceo deportivo pueden entretenerse a diario, desplazándose entre una fauna rica en salmones, meros, pulpos, escrófalos y algas de diferentes colores, o bien incursionando en otras modalidades, en compañía de buzos guía. Otra variante es participar en excursiones programadas por operadores de esta actividad, siempre en un marco de seguridad y diversión.
Las aguas abiertas de Madryn permiten también el buceo profundo, el buceo nocturno (para conocer especies que no se ven durante el día), realizar pruebas de nitrox, de traje seco, fotografía submarina o salidas para explorar naufragios.
El abrazo al mar
La aventura del buceo comienza todos los días y cualquiera sirve para elegir un nuevo lugar de inmersión, porque las posibilidades cuando las condiciones del mar lo permiten supera la docena, tanto para buzos aficionados como para aquellos experimentados que ya cuentan con brévet.
Desde aquel día de 1963 en que se fondearon seis ómnibus para crear el primer parque artificial del país, esta actividad deportiva no dejó de crecer en ningún momento. El Golfo Nuevo es el sitio ideal para la práctica en estas aguas azules, encerradas por ese abrazo que parece darle la tierra al mar.
En el abanico de posibilidades encontramos, entre otros sitios:
Parque Punta Este: profundidad aproximada, 10 metros. Se trata de un afloramiento rocoso recubierto por anémonas, pólipos de llamativos colores y moluscos bivalvos. En sus cuevas y grietas es común ver meros, turcos y salmones.
Naufragio Albatros: profundidad aproximada, 25 metros. Hundido intencionalmente, este buque pesquero se encuentra asentado sobre fondo arenoso. Tiene una sorprendente vida animal y vegetal, y se halla recubierto de bogavantes, cangrejos, algas rojas y verdes, arañas de mar, sargos, meros y salmones de gran porte.
Parque de las Piedras: profundidad aproximada, según la marea, entre 4 y 11 metros. Formado por arrecifes naturales, el parque se encuentra a unos 500 metros de la costa. Tiene pequeñas cuevas y una rica fauna marina.
Pesqueros Kouralis y Jorge Antonio: profundidad aproximada, 12 metros. Se encuentran a cada lado del muelle Almirante Storni. Se observan estrellas de mar, algas pardas y rojas, anémonas, moluscos y crustáceos. En buceo nocturno es posible ver pulpos y pequeños meros.
Goleta Río de Oro: profundidad aproximada, 17 metros. Se encuentra a unos 400 metros del muelle Piedrabuena, con incrustaciones de moluscos y crustáceos, y hábitat de meros, salmones, cangrejos y pulpitos.
Parque Nuevo: profundidad promedio, 8 metros). Se trata de un arrecife artificial constituido por naufragios de pequeño porte y automóviles hundidos intencionalmente con la finalidad de crear un ambiente propicio para diferentes especies.
Punta Cuevas: profundidad promedio, 7 metros. Ideal para iniciados y para hacer snorkeling. El fondo es de arena y roca, y está a unos 300 m de la costa. La fauna está compuesta por estrellas de mar, meros, turcos y pulpos.
El buceo en Puerto Madryn no se agota en estos sitios; también se realizan salidas de tres días, para vivir embarcado y recorriendo parte de la costa poblada de acantilados y cuevas, lugares donde se realizan diferentes inmersiones, alejadas de los sitios más frecuentados por los turistas y los deportistas de temporada.
A escasos 210 kilómetros de Madryn, en la Península Valdés, hay aguas de muy buena visibilidad y servicios de operadores especializados. Puerto Pirámides y Punta Cormoranes se suman al placer del buceo deportivo con interesantes lugares para inmersión.
Datos útiles
Alojamiento
La habitación doble es un hotel de 4 estrellas, cuesta desde 115 pesos. Tres estrellas, desde 100. Dos estrellas, desde 55.
Operadores
Lobo Larsen, en Irigoyen 144, Puerto Madryn; 02965 15516314. Scuba: Boulevard Patagonia, Brown 893; 02965-452699. Aquattours, Rawson 6 (Muelle Viejo); 02965-451954. Los precios para las salidas oscilan alrededor de los 95 pesos, aunque varían según el sitio por explorar.
En Internet
www.madryn.gov.ar/turismo/
Por Carlos M. Couto
