Premios Oscar 2022: por primera vez en la historia, la ceremonia tendrá dos duraciones diferentes

En medio de cuestionamientos que están lejos de agotarse, la Academia de Hollywood trabaja en el complicado diseño de la ceremonia del Oscar 2022, que dejará el anuncio de ocho de los 23 premios fuera de la transmisión en vivo por TV para todo el mundo. En vísperas del tradicional almuerzo con que la Academia agasaja a todos los nominados, previsto para el próximo lunes, las máximas autoridades de esa entidad confirmaron por primera vez que el premios de la Academia tendrá dos tipos de duración.

Mientras tanto, por primera vez, una voz de altísimo perfil criticó en público los cambios dispuestos en el Oscar por los organizadores, a instancias de los productores televisivos. Al recibir un reconocimiento al mérito de parte de la Asociación de Críticos de Hollywood, el director Guilermo del Toro señaló que no es momento de aplicar modificaciones.

“Este no es el año para no escuchar en vivo los nombres de todos los ganadores. Es el año para que todos cantemos y lo hagamos en vivo”, dijo sobre la decisión de la Academia de dejar al margen de la transmisión en vivo el anuncio de los ganadores de los premios por las tres categorías de cortometraje, edición, música original, maquillaje, sonido y dirección de arte.

Del Toro es el director de El callejón de las almas perdidas (Nightmare Alley), que llega a la ceremonia con cuatro nominaciones, una de las cuales (dirección de arte) no formará parte de la transmisión principal en vivo. También es candidata a la mejor película, fotografía y vestuario.

La ceremonia número 94 de la historia del premio que se transmitirá en vivo para todo el mundo a través de la pantalla el domingo 27 de marzo durará tres horas, desde las 22, hora argentina. En cambio los invitados que ocuparán las butacas del Teatro Dolby en la noche del domingo 27 de marzo, tendrán un Oscar de cuatro horas (a partir de las 21, hora de nuestro país), porque en los 60 minutos previos al comienzo de la transmisión en vivo –presentada por Regina King, Amy Schumer y Wanda Sykes- se anunciarán y entregarán los ocho premios previamente “apartados”.

Según reconocieron el presidente de la Academia, David Rubin, y la CEO de la entidad, Dawn Hudson, el propósito es hacer todos esos ocho anuncios con el teatro lleno y frente a las cámaras. Las autoridades de la Academia dijeron en una conversación con el sitio Deadline que cada premiado tendrá un tiempo similar al de las ediciones previas para agradecer el premio. Más tarde, cuando la ceremonia en vivo por TV ya esté en marcha, todos esos discursos se reproducirán editados.

Más allá de estas innovaciones ya anunciadas, la idea de la Academia es que las 23 categorías sean tratadas en un pie de igualdad, estén o no incluidas en la transmisión televisiva. Pero existe la preocupación de que aparezcan nuevos cuestionamientos, similares a los planteados por Del Toro en las últimas horas, o que algunos nominados directamente no asistan a la ceremonia o al resto de los actos organizados por la Academia en señal de protesta. Una iniciativa de ese tipo circuló hace un par de semanas entre los músicos nominados.

Para que todos estos cambios se hagan realidad y al mismo tiempo no se altere la rutina horaria de la alfombra roja, la Academia y los productores televisivos están organizando un arribo escalonado de las grandes figuras e invitados “Clase A” (los que ocupan las butacas preferenciales) con el fin de que todas las personalidades involucradas en los anuncios de las categorías que se entregarán antes (las ocho “marginadas” por la Academia) puedan estar sentados en el momento del anuncio y la entrega de esos premios.

También se confirmó que por los protocolos y las medidas sanitarias relacionadas con el Covid, la platea del Teatro Dolby tendrá esta vez 800 butacas menos. La mayor separación entre las butacas garantizará, según los organizadores, el distanciamiento social y permitirá el desarrollo de una ceremonia presencial en un 100%. Frente a las cámaras de TV, la ambientación de la clásica escenografía del Oscar este año tendrá visibles modificaciones.

Todavía no hay precisiones respecto de cómo será la transmisión en vivo y qué características distintivas tendrá este año para tratar de recuperar el rating perdido, un año después de que el Oscar registrara las mediciones de audiencia más bajas de toda su historia. Tampoco se sabe hasta ahora si se interpretarán en vivo durante la ceremonia televisada los cinco temas nominados como mejor canción. Allí aparecen nombres de alto poder de convocatoria como Billie Eilish, Van Morrison y Beyoncé, potencialmente ideales para cumplir con la expectativa de mejorar los índices de audiencia.

“Habrá algunas sorpresas. Habrá algunas caras inesperadas en el programa. Los cinéfilos existe en todos los ámbitos de la vida y están en todas partes del mundo. Hay personas muy exitosas en muchas facetas, además de la realización de películas, que son cinéfilos. Queremos incluir esos testimonios en nuestro programa”, adelantó Rubin, enigmático. ¿Esto quiere decir que fanáticos del cine dedicados a otras actividades (¿la política? ¿el deporte? ¿la investigación científica?) estará el 27 de marzo acompañando la transmisión del Oscar? No lo sabremos hasta ese momento.

El sueño de los productores, según trascendió en los últimos días, es convocar a elencos completos de películas consagradas para presentar en conjunto las categorías más importantes. Uno de ellos, trascendió en Deadline, podría ser el de El padrino, al cumplirse 50 años de su estreno en los cines.

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