Qué hicieron Jimmy Fallon, Ashton Kutcher y Mila Kunis para ser duramente criticados y por qué tuvieron que salir a pedir perdón

En pocos días se cumplirán seis años de la publicación de la investigación que realizó el diario The New York Times, que señalaba al entonces poderoso productor Harvey Weinstein como un abusador sexual serial, que durante décadas se había aprovechado de su posición de poder para cometer delitos sin consecuencias de ningún tipo. La contundencia de aquel artículo y de los que siguieron, además de las declaraciones y denuncias de sus víctimas pusieron de cabeza a Hollywood y destaparon una práctica sistemática -y reconocida por todos sotto voce-, de maltratos, conductas inapropiadas y criminales especialmente apuntada contra las mujeres. Y aunque muchos así lo habrían querido, las consecuencias de aquel escándalo no se agotaron con las condenas a prisión para Weinstein ni con el despido y el ostracismo que recibieron otros abusadores de la industria. De hecho, estos últimos días nuevos coletazos de aquel cisma volvieron a poner en cuestión el juego de apariencias del mundo del espectáculo y confirmaron que en tiempos de redes sociales y acceso sencillo a los archivos de video de las últimas décadas, es probable que a muchos el pasado vuelva como trending topic para pasarles factura. Ahora, son los nombres de Jimmy Fallon, Ashton Kutcher y Mila Kunis los que se ven implicados.

Casi como si se tratara de algún tipo de revancha kármica, un día después de oficiar de maestro de ceremonias en la presentación del nuevo disco de los Rolling Stones en Londres, el comediante Jimmy Fallon volvió a estar en el centro del ciclo de noticias en relación con Rolling Stone, aunque en la segunda vuelta el motivo fue la publicación de una nota en la revista de ese nombre, que asevera que el conductor creó y propició un clima tóxico de trabajo en The Tonight Show y que suele tener actitudes abusivas con su equipo además de una documentada costumbre de estar alcoholizado en horas de trabajo.

Pocas horas después de la viralizacíón de la nota, NBC, la cadena que emite el legendario programa de entrevistas, publicó un comunicado en el que, sin nombrar a Fallon, aseguraba priorizar “el ambiente de trabajo respetuoso” y aclaraba que todas las quejas de empleados habían sido oportunamente atendidas. Claro que las palabras oficiales poco hicieron para desacelerar el impulso de los cientos de miles de cibernautas que empezaron no solo a dar su punto de vista sobre Fallon sino también a desenterrar clips de sus programas del pasado para demostrar que siempre estuvo claro que detrás de la sonrisa del conductor se escondía una personalidad mucho más complicada y oscura.

Que al día siguiente se conociera el pedido de disculpas de Fallon a su equipo solo funcionó como tirar nafta al fuego. El hecho que desde mayo, debido a la huelga de guionistas, The Tonight Show esté fuera del aire le quita al conductor la posibilidad de aclarar las acusaciones -o a hacerse cargo de ellas-, en la TV. Aunque podría referirse a ellas en el recientemente lanzado podcast Strike Force Five, en el que junto a otros cuatro conductores televisivos en pausa por las medidas sindicales, Jimmy Kimmel, Stephen Colbert, Seth Meyers y John Oliver, charlan sobre sus experiencias en el negocio con el fin de recaudar fondos para los integrantes de sus equipos que llevan cuatro meses sin percibir ingresos. En todo caso, su ausencia en la TV podría beneficiarlo en esta época de noticias y escándalos de digestión rápida.

Así, en poco más de 24 horas, las noticias sobre el potencial fin de su carrera o su posible cancelación quedaron en segundo plano en relación al segundo traspié de estrellas de Hollywood de la semana. Otro mal paso que las redes pusieron bajo el microscopio de inmediato y con especial alevosía, tal vez porque, como Fallon, sus protagonistas, Ashton Kutcher y Mila Kunis, contaban hasta ahora con la total simpatía del público.

Cuando a finales de la semana pasada se supo que Danny Masterson, uno de los integrantes originales del elenco de That 70′s Show, fue condenado a 30 años de prisión luego de ser encontrado culpable de dos cargos de violación, no solo se volvió a señalar su vínculo con la cienciología y sus cuestionables prácticas sino que se hicieron públicas las cartas publicadas en Substacks, la plataforma de newsletters usada por los periodistas que cubrieron el juicio. Esas misivas fueron escritas por algunos de sus colegas y amigos, que le escribieron al juez del caso para intentar aligerar su condena. Y así, el caso Fallon quedó tapado, parcialmente, por las cartas de Kutcher y Kunis, viejos compañeros y amigos de Masterson desde los tiempos de la sitcom, que lo describieron en sus textos como un “ejemplo”, un protector “hermano mayor” y alguien que había evitado que como jóvenes estrellas cayeran en el uso de drogas.

La reacción del público fue inmediata y contundente. Ya el viernes empezaron a aparecer cortes de una vieja entrevista, en la que Kutcher recordaba entre risas que a los 19 años había aceptado una apuesta de Masterson, que lo desafió por diez dólares a besar en la ficción “con lengua” a Kunis, en ese momento de 14. También aparecieron algunos clips de su tiempo como productor y conductor del programa de bromas Punked, en los que se refería a Hillary Duff, entonces de 15 años, como una de esas chicas que él y muchos otros estaban esperando que cumpliera 18.

Para sumarle confusión y suspicacias a todo el asunto y como si el trabajo de los arqueólogos de YouTube no fuera suficiente, horas después de que sus cartas se hicieran públicas y generaran rechazo, algunos se ocuparon de recordar que Kutcher había estado involucrado tangencialmente en el asesinato de Ashley Ellerin, una estudiante de diseño de 22 años con la que salía a principios de los 2000. En 2001, la joven fue apuñalada en su casa por el asesino serial Michael Gargiulo horas antes de que el actor pasara a buscarla para una cita. En el juicio contra Gargiulo en 2019, Kutcher declaró como testigo que a su llegada a la casa de Ellerin, como ella no contestaba a la puerta, él se asomó por la ventana y vio lo que pensó que eran manchas de vino en la alfombra. Al no poder dar con ella, llamó a la policía que llegó al lugar, forzó la puerta y encontró a Ellerin asesinada.

Claro que esa descripción de los hechos, ya reportada y conocida hace años, ahora, ante la defensa que hicieron Kutcher y Kunis de Masterson, fue puesta en duda en las redes sociales y en particular por Carnell Bixler, la tercera denunciante de Masterson, cuyo caso no pudo ser probado por la fiscalía. Luego de que el sábado la pareja de actores publicara un video en Instagram reconociendo que su defensa de Masterson podría haber herido a muchas víctimas de abuso y violación y que esa no había sido su intención al escribir las cartas dirigidas al juez, Bixler publicó un mensaje en la misma red social criticando la actitud de los intérpretes. Además da a entender que la descripción que hizo Kutcher del día del crimen de Ellerin no era cierta y escondía un secreto que “acabaría con él”. A esta altura, más allá de si Bixler aclara a qué se refiere o deja el tema de lado, en el caso de Kutcher y, en menor medida, de Kunis, la opinión pública ya dio su veredicto. Lo mismo ocurrió con Fallon. Y, lamentablemente para ellos, en la corte de las redes sociales no parece haber nadie dispuesto a escribir cartas que intenten reducir sus condenas.