Vio a un cartonero en la calle, un detalle lo conmovió y tuvo un gesto que enmudeció a todos: “Hacé algo”

Siempre se escucha por ahí decir que las pequeñas acciones pueden representar grandes cambios. A veces simplemente son gestos desinteresados o incluso una palabra, lo que le modifica el día a una persona cuando más lo necesita. Una acción, por más simple que parezca, y en el momento más inesperado, puede sacarle una sonrisa tanto al que la hace como al que la recibe. Esta vez, el protagonista de la historia fue un hombre llamado Gastón, que recibió aplausos y elogios virtuales en las redes sociales. ¿El motivo? Mientras circulaba en auto con su hija, vio a un señor descalzo que juntaba cartones en la calle y no lo dudó: se acercó y le dio una sorpresa muy especial. Todo quedó registrado en unas imágenes que rápidamente se viralizaron.

El 1 de abril, Gastón De Vito circulaba en auto por la ciudad de Rosario, junto a su hija Martina, de 10 años. Mientras manejaba con destino a la casa de su madre, se cruzó con un hombre que caminaba descalzo por el asfalto mientras empujaba su carrito por la calle, en busca de cartones y residuos que pudieran serle útiles. Él no pudo evitar mirarlo y su hija se conmovió ante la situación, por lo que decidieron no pasarlo por alto.

Ante esto, decidió que las cosas iban a ser un poco diferentes, o mejor dicho, que él las iba a cambiar. Dio la vuelta a la manzana y sin pensarlo, Gastón se bajó del auto en el cruce entre las calles Uriburu y Entre Ríos y tuvo un gesto que dejó a todos profundamente emocionados.

El rosarino se quitó sus zapatillas en el medio de la calle para regalárselas, ya que el cartonero estaba descalzo. “Le pregunté cuanto calzaba ‘41′ me respondió y le dije: ‘Mirá justo igual que yo. Así que te doy mis zapatillas’”, le relató Gastón a LA NACION. El hombre, sin salir de su sorpresa, primero no le dijo que no, pero después, con lágrimas en los ojos, le agradeció el gesto y le remarcó que “Dios lo veía todo” y que iba a “recompensarlo”.

“Se estaba poniendo un poquito triste y para sacarlo de esa situación le hice una broma: ‘Encima sos de Central, igual que yo’, porque tenía puesta la camiseta. Él ahí se la agarra y me la quiere regalar, pero le dije que no, que se quedara tranquilo”, relató De Vito.

Mientras regresaba a su auto, detrás de él, el hombre se sentó en el cordón de la vereda a probarse el calzado, justo del talle apropiado. Con una mezcla de emociones, entre sorprendido y conmovido, saludó con la mano a la familia que ya estaba en el auto. La pequeña Martina grabó con un teléfono celular toda la escena, una acción digna de admirar y por qué no, de replicar.

Padre e hija, decidieron editar el clip, sumarle música y un texto y compartirlo en Instagram para “dejarle un mensajito lindo a alguien”. “Video capturado por mi bella hija. Que sé yo, cambiar el mundo es un proyecto que nos queda grande, pero si te pinta, si te nace, si podes, hacé algo por alguien hoy”, fueron las palabras escritas sobre las imágenes que se viralizaron en las redes.

“Este video que grabo mi hijita me pareció bien subirlo porque tal vez, le deje algo alguien”, fueron las palabras que escribió en el posteo, que rápidamente superó las 25 mil reproducciones. Muchos usuarios de la red social aplaudieron el gesto que tuvo y remarcaron el buen ejemplo que fue para su pequeña.

“Sos una persona gigante y un gran ejemplo para tu hija. ¡Un orgullo gigante de ser humano! Todo vuelve en esta vida y por estos actos Dios recompensa ¡Sos un genio!”; “Enormes los valores que le estás transmitiendo a tu hija Gastón, nunca cambies. Lo que das a los demás es lo que sos” y “El mundo necesita más gente como vos”, fueron algunos de los comentarios que dejaron los usuarios en el posteo.

Gastón contó que se pusieron muy contentos con las repercusiones y expresó sus dedeos de que el mensaje que quisieron transmitir, llegue a muchas personas. Asimismo, comentó que desde la Municipalidad le dijeron que “iban a tratar de buscar al señor para mejorar su situación”: “Somos todos parte de una sociedad; hay que tratar de involucrarse de la manera que uno pueda, no hace falta regalar nada, solo acercarles un vaso de agua, preguntarles como están, si necesitan hacer un llamado”.

Pero por sobre todas las cosas, y además del gesto desinteresado que tuvo y que tan bien le hizo al señor que antes de cruzarse con él, se veía obligado a trabajar descalzo, generó mucha emoción que haya podido compartirlo con su hija, que le diera un ejemplo digno de imitar y que ella misma decidiera involucrarse.

“Marty ya adoptó esa forma de pensar, que a las cosas que sirven y que no usa más, hay que buscarles otro destino para personas que no tienen la posibilidad de comprarlas”, expresó Gastón y concluyó: “Hemos dado de todo, en muchas ocasiones. Para nosotros la gente que está en esas situaciones nunca es invisible. Y es algo muy lindo para mi saber que mi hijita tiene esa forma de ser”.

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