La dura reacción de Luis “Toto” Caputo por los dichos de Llaryora sobre los “pituquitos de Recoleta”

En uno de los momentos de mayor visibilidad pública que tuvo después de ganar la elección para gobernador de Córdoba, cuando celebraba el domingo la victoria en la capital de su delfín Daniel Passerini, el mandatario electo Martín Llaryora arremetió contra los popes de Pro que desembarcaron en esa provincia para la campaña y los tildó de “pituquitos de Recoleta”. Pero esta mañana llegó una dura reacción contra esos dichos del exministro de Finanzas macrista Luis “Toto” Caputo, quien entendió que el dirigente peronista es “un boludo”.

A estas consideraciones que irritaron a la plana mayor de Juntos por el Cambio, Llaryora las vertió como una forma de arremeter, sobre todo contra los presidenciables, Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta, que viajaron hacia allá para dar su respaldo a Rodrigo de Loredo, con la convicción de que iba a imponerse en las elecciones, algo que finalmente no pasó. “Basta de que nos venga a explicar qué hacer o cómo hacer los ‘pituquitos’ de Recoleta”, aseveró esa noche el futuro gobernador, quien alegó que las elecciones se ganan en diálogo con la gente y no “paseándose por los medios de la Capital Federal”, en un cuestionamiento directo a quien era candidato opositor.

Tras eso hubo una serie de reacciones en cadena y entre ellas la que llamó la atención fue la de Caputo, que cultivó un bajo perfil desde su salida del Ejecutivo. “La política está plagada de boludos como este, que llegan ahí y creen que tienen que gritar estupideces o agredir para hacerse escuchar o respetar”, apuntó el exfuncionario cercano al entonces presidente Mauricio Macri y uno de los que delineó la política económica de esos cuatro años frente de la Casa Rosada.

Pero eso no fue todo. Caputo también deslizó un dardo a Rodríguez Larreta. Es que comentó un emoji con una carita riéndose cuando le preguntaron: “¿Qué calificativo aplica a los que quieren dialogar con los boludos en cuestión?”. Fue una clara referencia al jefe de Gobierno porteño, por su intento de acordar para estas elecciones con Juan Schiaretti -jefe político de Llaryora-, algo que despertó una fuerte oposición en el ala dura de Juntos por el Cambio y que por eso no prosperó.

En tanto, ayer a Rodríguez Larreta le habían preguntado por las expresiones del próximo gobernador cordobés y, fiel al estilo discursivo que mantuvo durante todo lo que va de la campaña, se limitó a decir: “Yo no creo en la política de las agresiones, jamás me van a ver a mí del lado de la violencia y de las agresiones personales, nunca. Creo en la Argentina de los hechos y de los resultados, como mostramos aquí en la Ciudad. Para sacar este país adelante tenemos que estar juntos, eso es lo que propongo, una Argentina de unidad”.

Por su parte, Schiaretti también buscó bajarle el tono a lo que dijo quien será su sucesor, y afirmó que esa declaración no representaba una crítica a los porteños, sino a los gobernantes de la Argentina y a la falta de preocupación por el interior.

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