Coleccionista indio busca preservar el pasado para las futuras generaciones
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LA NACION
NUEVA DEHLI (AP) — Cámaras de una era pasada. Máquinas de escribir oxidadas. Radios vintage. Cajas de fósforos que alguna vez se usaron para encender cigarrillos comprados de contrabando.
En una era de nueva tecnología e inteligencia artificial, una visita a la casa de Aditya Vij en Nueva Delhi es como entrar en una máquina del tiempo. Cada rincón de su museo se siente como un capítulo de historia cuidadosamente construido.
El antropólogo es un ávido coleccionista de artefactos y ha dedicado su vida a las antigüedades. Durante décadas, ha recopilado tenazmente miles de artículos que abarcan varios siglos y ha documentado su relevancia y el impacto que han tenido en la sociedad.
Cada objeto coleccionable que ha rescatado se siente como una victoria contra el tiempo, dice Vij, subrayando su creencia de que tal vez los intentos de un individuo pueden resistir silenciosamente su borrado de la memoria de las personas.
"La emoción más profunda que siento al coleccionar estos artículos es la satisfacción de haber logrado salvar un pedazo de historia", afirmó Vij durante una entrevista rodeado de su invaluable colección de cámaras y gramófonos vintage.
Los fósiles de peces, caracoles, renacuajos y hojas de helecho que datan de millones de años son los objetos más antiguos de Vij. Pero tiene una pasión por otro tesoro de objetos que datan de alrededor de 1915: miles y miles de cajas de fósforos.
Su obsesión comenzó a la edad de 8 años, cuando descubrió su primera caja de fósforos mientras caminaba por las calles con su padre. Hoy, a sus 51 años, posee más de 22.000 cajas de fósforos.
Algunas de ellas tienen más de un siglo de antigüedad y sus etiquetas de portada muestran diferentes formas de representaciones religiosas y escenarios políticos de la época en que fueron producidas.
"No es solo la posesión de estas chucherías, sino el proceso de buscarlas lo que añade una capa de emoción para mí", comentó Vij, añadiendo que las cajas de fósforos simbolizan diferentes culturas en diferentes momentos.
Él dice que la preservación de la memoria a través de estos coleccionables impulsa a las personas a pensar en la artesanía de una época en la que la vida era más lenta y las decisiones eran más deliberadas.
Algunas de sus posesiones fueron adquiridas por casualidad.
Hace muchos años, dice Vij, vio a un chatarrero a punto de romper una radio antigua con un martillo. Gritó desde el otro lado de la calle y detuvo al hombre. El chatarrero, sorprendido, explicó cómo obtendría buen dinero por las piezas. Vij se ofreció a comprarla.
Hoy, esa radio se encuentra entre su colección existente de objetos vintage.
“Treinta segundos más y la habría perdido, y a veces eso es lo que se necesita: vigilancia y acción rápida”, expresó.
Vij describe su viaje como el de un hombre “que conecta el pasado con el futuro” y aspira a crear un museo en su casa que actúe como un espacio físico donde las generaciones más jóvenes puedan aprender sobre las innovaciones del pasado.
De lo contrario, dice Vij, estos objetos modestos se perderían para siempre en la vasta extensión de la nueva tecnología.
“Lo que una vez fue habitual se ha vuelto raro, a menudo olvidado, y solo ha dejado rastros de nostalgia y recuerdos”, comentó.
Vij también recibe solicitudes de padres que quieren que muestre a sus hijos cómo se usaban sus coleccionables en el pasado. Algunos quieren que sus hijos vean cómo funciona una máquina de escribir o cómo se tomaban fotos con una cámara de película.
Otros vienen a ver cómo solían operar algunos dispositivos domésticos, como los teléfonos de disco, las radios de tubo, las planchas, las máquinas de hacer helados y las linternas.
“Cuando me dicen (los niños) que no tenían idea de la existencia de estos objetos, es cuando siento una mayor urgencia por preservar la historia”, dijo.
En los últimos años, dice Vij, la tecnología ha evolucionado rápidamente y los dispositivos de su infancia quedaron obsoletos de la noche a la mañana. Cree que archivarlos es necesario.
“Espero que las generaciones más jóvenes se den cuenta de la importancia de la historia y la lleven adelante preservándola”, expresó.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.
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