Con Rochet, el arco uruguayo está en buenas manos
Su aparición fue una bocanada de aire fresco. Después de doce años en los que Fernando Muslera era el dueño casi exclusivo del arco Celeste, la llegada de Diego Alonso como nuevo seleccionador en 2022 trajo cambios y uno de ellos es Sergio Rochet.
Muslera, de 36 años y titular indiscutido para el 'Maestro' Oscar Tabárez entre fines de 2009 y 2021, es además el jugador uruguayo con más partidos mundialistas, 16, ya que jugó los siete de Uruguay en Sudáfrica-2010 (terminó cuarto), los cuatro de Brasil-2014 (eliminado en octavos por Colombia) y los cinco de Rusia-2018 (en cuartos por Francia).
Pese a que su nivel fue decayendo con el paso de los años y su titularidad era discutida por vastos sectores de la prensa y el público desde por lo menos Rusia-2018, no era fácil reemplazar al portero del Galatasaray turco, que ostenta 133 presencias en la selección uruguaya al igual que Edinson Cavani y solo superado por Diego Godín (159) y Luis Suárez.
Pero al 'Tornado' Alonso no le tembló el pulso y una de sus primeras medidas al asumir en enero de este año fue relegarlo al banco y confiarle el arco al 'chino' Rochet, el portero del campeón de la Liga local, Nacional.
"Conozco el puesto y sé lo que pasa cuando entra un arquero y sale el otro. Desde el momento en que el Chino agarró el arco lo ha hecho de manera espectacular y también lo tiene recontra merecido", aseguró Muslera, hoy segunda opción en el combinado dos veces campeón del mundo.
- De Alkmaar a la Celeste -
Y el 'chino' Rochet, de 29 años, aprovechó su chance y hoy es indiscutido en el once inicial, pese a ser uno de los escasos integrantes del plantel que juega en la liga uruguaya, junto al lateral José Luis Rodríguez y en los últimos cuatro meses el 'pistolero' Luis Suárez.
Desde su debut en la Celeste, en enero de este año en la victoria 1-0 en Asunción frente a Paraguay, partido que también marcó el estreno de Diego Alonso como seleccionador, mostró su seguridad y no soltó más el arco.
El espigado arquero, de 1,90 metros de altura, ya lleva 8 partidos disputados con Uruguay, con siete triunfos -cuatro por eliminatorias sudamericanas- y una derrota y solo ha sufrido dos goles.
"Se acerca un día soñado, que he ansiado mucho", afirma Rochet, que ya había sido citado por Tabárez para la Copa América de Brasil-2021, donde Uruguay fue eliminado en cuartos de final, pero fue suplente. "Ni en mis mayores sueños imaginaba (estar en un Mundial) y se lo he dicho a gente muy cercana.
"Uno siempre trabajó y se brindó", agrega Rochet, que con 21 años y sin haber debutado en el Danubio de la primera división uruguaya se mudó en julio de 2014 al AZ Alkmaar.
En ese equipo de la liga neerlandesa estuvo durante tres temporadas, con 71 partidos jugados y 93 goles encajados, y de ahí se marchó al Sivasspor turco, donde jugó entre 2017 y 2019 quince encuentros y recibió 28 goles.
Haber tenido "un pasaje por el fútbol de Europa" puede ser un punto a su favor, estima Rochet y eso puede ser un punto a su favor ya que ahora "vamos a enfrentar a jugadores que quizás uno no está acostumbrado, porque uno se enfrenta a jugadores de Sudamérica y la Concacaf" normalmente.
Uruguay integra el Grupo H junto a Corea del Sur, contra el que debutará el jueves, Portugal y Ghana.
A mediados de 2019, el 'chino' volvió a Uruguay para defender al Nacional siendo un desconocido para el público de este país y tres años mas tarde, y gracias a sus grandes actuaciones, se prepara para debutar con la Celeste en un Mundial, relegando a un histórico como Muslera.
Ma/psr
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