Un gobernador ucraniano combate a Rusia con humor
Vitali Kim tiene un retorcido sentido del humor. A lo mejor es necesario: es gobernador de la región de Mykolaiv en el sur de Ucrania, el frente donde se rumorea que los combates contra Rusia podrían volver a reactivarse.
Por la noche los misiles sacuden la capital provincial. El suministro de agua está cortado y la oficina de Kim no es más que un agujero abierto al cielo, destrozada por un misil en las primeras semanas de la guerra.
Tras ese bombardeo en marzo, entre sombrías actualizaciones del balance de víctimas en redes sociales, bromeó que solo se escapó de figurar entre los 37 muertos porque se había quedado dormido.
Sus videos regodeándose en un vehículo ruso capturado o riéndose con bromas contra Moscú lo han convertido en un personaje de culto en apenas unos meses.
Es innegable el intento de este hombre de cara redonda y 41 años de restar gravedad a la crisis del país.
"Hay diferentes formas de gestionar una situación", explicó a AFP el miércoles con una media sonrisa. "Este es mi estilo, no significa que sea fácil".
"Disfruto con cada trabajo que hago", añadió.
- Alivio cómico -
Mykolaiv es una soleada región del sur ucraniano junto al mar Negro, hacia donde se desplaza el conflicto que ya se acerca al medio año.
Como muchos cargos públicos, Kim emula el estilo deportivo-militar adoptado por el presidente Volodimir Zelenski desde el inicio de la invasión en febrero.
El miércoles apareció ante los periodistas con pantalones de camuflaje y una camiseta negra con la silueta del alienígena "Predator" de la película homónima de 1987 y el incongruente lema "departamento de patrulla policial".
A la sombra del edificio municipal donde antes estaba su oficina, con sus paredes todavía cubiertas con restos de sangre, explicó este liderazgo humorístico que asume desde el inicio de la guerra.
"Tomé la decisión de dejar a nuestro enemigo como estúpido y tonto", contó. "Mucha de nuestra gente necesitaba esto para no tener miedo".
Esos compases iniciales quedaron atrás pero a la gente "simplemente le gusta" su estilo sarcástico. "La mayoría no lo necesitan" como antes, explicó.
Su actitud humorística se alinea con el comportamiento adoptado durante estos casi seis meses por gran parte de los ucranianos, cuyo presidente Volodimir Zelenski era antes cómico.
Cuando un aeródromo ruso en Crimea sufrió explosiones la semana pasada, los dirigentes ucranianos sospechosos de haber organizado el ataque reaccionaron con tímido regocijo, aunque sin reivindicar su responsabilidad.
Kim también se considera el artífice del uso de la palabra "orcos" para referirse a los soldados rusos. El mote, ahora ampliamente extendida entre los militares ucranianos, alude a monstruosas criaturas de novelas fantásticas y videojuegos.
"Eran realmente como ellos porque estaban fuera de sí", dijo el gobernador. "La propaganda en Rusia durante decenas de años cambió su forma de pensar".
"Ni siquiera ellos entendían lo que hacían", añadió.
- Faceta oculta -
Pero Kim, hijo de profesores, no es bufón a tiempo completo. Al ser abordado por la preparación de un contraataque ucraniano en su región, su rostro se endureció.
Y la respuesta fue escueta: hay una "buena situación" en el frente. Pero planificar un ataque "no es tan simple" y Ucrania está comprometida con una "defensa activa".
"Contraofensiva es una expresión muy amplia", dijo.
A pesar de su personaje efusivo, no dio pistas: da la sensación que detrás del bromista se esconde otro hombre, uno que hace previsiones ante cualquier nuevo giro que pueda producirse en la guerra con Rusia.
Alguna gente entendió su enfoque humorístico como una señal de debilidad. "Eso no es verdad, porque puedo sonreír y puedo destruir algo".
jts/jbr/dbh/meb
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