Tregua en el conflicto gremial del Sarmiento

Tras ocho días de conflicto gremial en el ferrocarril Sarmiento , que provocó demoras de hasta 45 minutos en el servicio por el quite de formaciones en las horas pico, el Ministerio de Trabajo de la Nación dictó ayer una conciliación obligatoria por 15 días. Los delegados ferroviarios, que reclaman un aumento salarial del 40 por ciento y el pago de un resarcimiento económico, confirmaron que "acatarán la decisión" y que se sentarán a dialogar para intentar llegar a un acuerdo.

El servicio se restablecería hoy con normalidad, y el gremio aseguró que no habrá paro de actividades, como habían anunciado durante la última semana. El ministerio que encabeza Carlos Tomada anunció la decisión antes de la asamblea que realizaron los gremialistas liderados por Rubén Sobrero, quienes planeaban profundizar la protesta con un paro total de actividades.

La resolución de Tomada cambió el curso del conflicto y fue recibida con sorpresa por la Unión Ferroviaria. "No imaginé que iban a dictar la conciliación obligatoria el mismo día en que terminaba el quite de colaboración y nos disponíamos a definir si íbamos a un paro por 24 horas", dijo ayer a LA NACION Rubén Sobrero.

De todas maneras, los ministerios de Interior y Transporte y Trabajo notificaron oficialmente a la Unión Ferroviaria que quedó cerrada y desestimada la posibilidad de otorgar el "resarcimiento económico" pedido por Sobrero.

El ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo , declaró que "el Ministerio de Trabajo rechazó el resarcimiento por improcedente en un dictamen emitido el viernes pasado". Y agregó: "Sobrero miente, acá no hay nada más que negociar. Ahora que acataron la conciliación le pido que se deje de molestar a los pasajeros y se ponga a trabajar por el ferrocarril, que estamos en un proceso de renovación histórica que se materializará en 60 días en el Sarmiento".

Precisamente, mañana el ministro y la presidenta Cristina Kirchner presentarán los 72 coches nuevos que llegaron desde China para incorporar al ramal. La ceremonia estaba prevista para ayer, pero se canceló porque la primera mandataria acompañó a su madre, que fue sometida a una intervención quirúrgica en el Sanatorio Otamendi.

Los ferroviarios, en cambio, fueron cautos ante los dichos de Randazzo. "Desde que se inició el conflicto pedimos una instancia de diálogo, así que vamos a acatar la conciliación obligatoria", dijo el dirigente gremial Edgardo Reynoso, quien además aclaró que permanecerán "en asamblea permanente".

Reynoso explicó que no sólo reclaman un aumento salarial, sino también la recuperación de eventuales diferencias existentes en la liquidación del monto de los tickets alimentarios y, además, un resarcimiento por el pase de un operador a otro, cuando TBA fue desplazada y varios servicios ferroviarios quedaron en manos de sociedades estatales. Esto último implicaría un desembolso total por $ 300 millones que el gobierno nacional se niega a realizar.

La puja gremial comenzó el lunes de la semana pasada, cuando los delegados del tren Sarmiento decidieron quitar ocho trenes del servicio en las horas pico. Si bien ahora los delegados acatarán la conciliación obligatoria, Randazzo ya dijo que "no habrá negociación posible", por lo que se abre un interrogante sobre cómo se resolverá el conflicto entre la Nación y los ferroviarios.

Florencio Randazzo

Min. de Interior y Transporte

"Sobrero miente, acá no hay nada más que negociar. Le pido que se deje de molestar a los pasajeros y se ponga a trabajar por el ferrocarril"