
"Al robot cirujano nunca le tiembla la mano"
Lo dijo Pedro Ferraina, jefe de cirugía del Hospital de Clínicas
1 minuto de lectura'
Los expertos en medicina quirúrgica podrán evaluar todos los pros y los contras de las nuevas tecnologías. Pero el cirujano robótico Da Vinci, que hoy a las 18 operará por primera vez en el país, tiene una ventaja indiscutida sobre sus colegas de carne y hueso: "A él nunca le tiembla la mano", remata con un toque de humor el doctor Pedro Ferraina, jefe de cirugía digestiva del Hospital de Clínicas, lugar donde se realizará la intervención.
Se trata de la primera en su tipo en América latina, que además será transmitida en vivo ante 1000 cirujanos de todo el mundo que participan del 76° Congreso Argentino de Cirugía, que comienza hoy en Buenos Aires.
"El robot operará a un hombre de 50 años con acalasia, una enfermedad que consiste en un trastorno motor del esófago que impide la progresión del alimento hacia el estómago", explica Ferraina, que también preside el congreso.
Según trascendió, al ser consultado inicialmente por los médicos, el paciente se atemorizó, "hasta que le explicamos en detalle cómo se realiza la operación, cuáles son los beneficios y quiénes estarían al mando, entonces no lo dudó ni un segundo más", cuenta Ferraina, que luego aporta algunos de esos detalles.
En primer lugar, hay que mencionar que los robots como el Da Vinci operan guiados por cirujanos. "Los cuatro brazos robóticos [el modelo anterior del Da Vinci tenía tres] se accionan mediante una consola con imagen tridimensional. Es decir que el cirujano, cómodamente sentado en un sillón, comanda la intervención desde allí, con una visión magnificada del campo quirúrgico y los brazos del robot."
Esfuerzo conjunto
La iniciativa forma parte de un proyecto conjunto entre las universidades de Illinois, Estados Unidos, y de Buenos Aires -de la que depende el Hospital de Clínicas-, y la compañía fabricante del robot.
En este caso, el doctor Santiago Horgan, especializado en cirugía robótica de la Universidad de Illinois, será el responsable de la operación, junto con un equipo médico compuesto por otros dos cirujanos argentinos que también residen en el mismo país.
Para Horgan, uno de los pioneros en este tipo de operaciones en Estados Unidos, la intervención que hoy comandará es la número 601. Consultado por LA NACION pocas horas antes del evento, el especialista comentó: "A Santiago [el paciente que hoy entrará en el quirófano] le explicamos que esto no es un experimento. En Estados Unidos realizamos entre 5 y 8 cirugías diarias, y participar de la primera intervención en la Argentina es un orgullo. Hay muchos que aún consideran la cirugía robótica como la tecnología del futuro, lo cual no es así. Se trata de una técnica que forma parte de la medicina actual."
En este sentido, Horgan señala que si bien todavía se está investigando en distintas áreas, "en otras ya está totalmente demostrado que la cirugía robótica es superior, como por ejemplo en trasplante renal, cáncer de esófago o acalasia, que es precisamente la enfermedad que tiene Santiago".
En el Hospital de Clínicas el paciente y la consola estarán en una misma sala. Pero los mismos instrumentos mecánicos se pueden manejar a dos metros de distancia o a 14.000; "un sistema que se denomina telecirugía y que ya ha sido aplicado en varias oportunidades", explica Ferraina.
Otra de las ventajas que menciona el experto, además de la telecirugía y la posibilidad de que el software de la máquina corrija el temblor de las manos, consiste en la extrema precisión milimétrica. "En las cirugías de órganos delicados esto es muy importante, y la visión de profundidad es un adelanto clave. Con la técnica laparoscópica, que es bidimensional, esto no es posible."
En cuanto a si la transmisión mecánica es más lenta, Horgan asegura que "la demora es de un apenas microsegundo, lo cual no tiene ningún tipo de incidencia durante la intervención. Y no sólo eso, en comparación con una cirugía de esófago convencional, el tiempo de operación con el Da Vinci se reduce en tres horas. La estadía hospitalaria y las complicaciones intraoperatorias también disminuyen".
Algunas desventajas
Hasta acá, los puntos a favor. Pero ¿cuáles son las desventajas de la cirugía robótica ? Una de las principales que impiden a nuestro país contar con un ejemplar como el Da Vinci es el costo. "Su precio oscila entre 1.200.000 y 1.500.000 dólares, por eso aunque nuestro deseo es que se quede en la Argentina, todavía no tenemos cómo financiarlo", asume Ferraina.
Luego advierte que el objetivo no es utilizar esta técnica para todas las operaciones. "No hay nada que con la cirugía convencional no pueda realizarse. Los robots se pueden implementar en algunos casos, pero no hay que pensar que se van a utilizar para todo; hoy un excelente complemento."






