Buenas ventas en el comienzo de arteba: el mejor pronóstico para una nueva era

“Esta ya se vendió”, fue la sorpresiva respuesta de los responsables de las galerías Popa y Grasa hoy por la mañana, apenas minutos después de que arteba abriera sus puertas a invitados especiales en el Centro Costa Salguero. Pasado el mediodía, varios museos ya habían sumado también obras a sus acervos. Y a las cuatro de la tarde “La Chola” Poblete no solo había vendido las cuatro acuarelas de gran formato y las máscaras de pan que exhibe en el stand de Banco Ciudad; “hay lista de espera para comprar más”, aseguró con una copa de champagne en mano César Abelenda, director de la galería Pasto, mientras negociaba en inglés con un coleccionista neoyorquino.

Rápidamente se disolvió así la tensión que implica estrenar una sede a medio camino entre La Rural, que alojó a la feria durante décadas, y La Boca, donde celebró el año pasado el 30° aniversario de la fundación que la impulsa. Cuando abra al público general, desde mañana hasta el domingo con obras de más de 400 artistas representados por 71 galerías, habrá completado una gran transformación impuesta por la pandemia.

Todo un símbolo de esta nueva era fue el encuentro entre Martín Castillo, director de la uruguaya galería Sur, y Paulo Miyada, curador en jefe del Instituto Tomie Ohtake, curador adjunto para América Latina en el Centro Pompidou, y también de la muestra de Anna María Maiolino que inaugura hoy el Malba. Ambos observaron cómo se descolgaba Boceto, una témpera sobre cartón realizada por Antonio Berni a fines de la década de 1950, que acababa de comprar el Museo de Bellas Artes Dr. Juan Ramón Vidal de Corrientes gracias al Programa de Adquisiciones impulsado por la Fundación arteba.

“Hay un panorama mucho más amplio que en otras ediciones de la feria”, observó Gabriel Romero, presidente del Instituto de Cultura de esa provincia, tras destacar el valor de esta iniciativa que ofrece un fondo de inicio gestionado a través de mecenas individuales; las instituciones deben aportar esa misma suma, y el total se invierte en obras para sus acervos.

“Estoy emocionada de estar de regreso por primera vez desde la pandemia en arteba, que es una plataforma maravillosa para las galerías nacionales –dijo a LA NACION Katherine Brodbeck, curadora de arte contemporáneo del Museo de Arte de Dallas-. Me interesó especialmente ver tantos participantes de fuera de Buenos Aires (Rosario, Córdoba, Salta), mucho menos familiares para el público internacional. La selección de artistas fue bastante fuerte este año: maravillosos ejemplos de arte moderno, así como emergentes comprometidos con tendencias que van desde la pintura surrealista hasta el video. Fue genial ver el trabajo de los que acababa de ver en Venecia: Mónica Heller y Gabriel Chaile”.

Una obra de este último comprada en la galería Barro –El impulso I-, fue la elegida para integrarse a la colección del museo estadounidense y otra de Heller -Naturaleza muerta (mortadela)- fue adquirida en Piedras por la Fundación Klemm, que compró además en Hache Esperando en la noche, de Santiago García Sáenz.

Gracias al mismo programa se vendieron también obras de Liv Schulman (Persona, representada por Piedras en el stand de Patio Bullrich al Museo Castagnino+macro); Guido Yannitto y Elda Cerrato (Algo que siempre se escapa #6 en Gachi Prieto, y Algunos segmentos, en Herltizka+Faria, al Museo de Arte Contemporáneo de Buenos Aires); Alejandro Pasquale, Claudia Alarcón, Lula Mari y Jimena Travaglia (en Quimera, Remota, Gachi Prieto y El Mirador, al Museo de Arte Contemporáneo de Salta); Valentina Lienur y Mariela Vita (Fucsia y Señoras de las vías, en Isla Flotante, y El sueño equivocado, en NN, al Museo de Arte Moderno de Buenos Aires); Melé Bruniard y Aníbal Brizuela (ambas sin título, en Diego Obligado y Del Infinito, al Museo Provincial de Bellas Artes Franklin Rawson); Dani Basso (Pendientes amarillos en Calvaresi, al Museo de Arte Contemporáneo de La Boca); Edgardo Antonio Vigo y Florencia Rodríguez Giles (Ajedrez proletario en MCMC y Tiro al parto en Ruth Benzacar, al Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires, con el aporte del Comité de Adquisiciones del museo); “La Chola” Poblete y Chiachio & Giannone (La Virgen gitana en Pasto y cuatro obras de la serie Elegante en Ruth Benzacar, al CA2M).

Con una donación de ICBC, el Malba compró además tres obras sin título de Claudia del Río. Y el Moderno, a través de su Programa Federal -con el aporte de la Asociación Amigos del museo-, otras de Noemí Gerstein, Carlos Herrera, Máximo Pedraza, Hoco Huoc y Federico Roldán Vukonich en Alejandro Faggioni, Ruth Benzacar, Mite y Fuga. La Fundación Andreani, en tanto, compró Imaginaria Paraguaya de Alberto Passolini, pintura que integra el Programa Obra Gran Formato auspiciado por Bodegas Trapiche.

“Estamos muy contentos con esta edición de arteba”, señaló Emanuel Díaz Ruiz, director del Museo Provincial de Bellas Artes Franklin Rawson de San Juan, que participa desde 2009 en el Programa de Adquisiciones de arteba. “Hay muy buenas propuestas, muy buenos vínculos, muy buenos diálogos”, agregó. Coincidió Manuel Segade, director del Centro de Arte 2 de Mayo (CA2M): “Es una edición espléndida -dijo el español-. Hay una energía que me recuerda a cinco o seis años atrás. El lugar funciona, todo está muy condensado y muy bien. Lo más sorprendente, como siempre, es el sector más joven. Que genera, como dice el título, esa especie de utopía del arte que vendrá. Encontrarte piezas fundamentales en la historia del arte argentino en venta en la feria, junto a galerías más jóvenes que muestran nuevos valores, creo que es un acierto fundamental. Y el esfuerzo de traer a la feria arte de otras regiones aporta una frescura importante”.

Para agendar

• arteba 2022 en el Centro Costa Salguero (Av. Costanera Rafael Obligado 1221), desde mañana hasta el domingo, de 12 a 20. Entradas disponibles en www.arteba.org. General: $1000; jubilados y estudiantes: $500; menores de 10 años y personas con discapacidad, sin cargo.
• Viernes, de 14 a 20: Tecne Nature, performance de Belén Romero Gunset.
• Viernes a las 18: “El mercado de arte contemporáneo en la postpandemia”, conversación organizada por LA NACION. Con Laura González, historiadora y asesora de arte y los galeristas Georgina Valdéz (The White Lodge), Leopol Mones Cazón (Isla Flotante) y Rodrigo Editore (Casa Triangulo).

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