Santiago Senén González, nueva Pluma de Honor

En el Día del Periodista, la Academia Nacional de Periodismo entregó el Premio Pluma de Honor a Santiago Senén González, periodista de larga trayectoria, por su constante compromiso con el ejercicio y la defensa de la libertad de expresión. En el acto, que tuvo lugar ayer en el auditorio Jorge Luis Borges de la Biblioteca Nacional, se rindió homenaje a Hermenegildo Sábat, anterior presidente de la Academia.

"Me crie entre papeles", dijo Senén González al recibir la distinción: una pluma de plata artesanal creada por el reconocido platero Juan Carlos Pallarols. Periodista con setenta años de experiencia, Senén González fue cronista y redactor de diarios como El Mundo, El Líder y Democracia; reportero en las agencias Tel Press, Noticias Argentinas y DyN, y director periodístico de Télam entre 1984 y 1989. Además, escribió columnas de opinión y es miembro de la Academia Argentina de Artes y Ciencias de la Comunicación.

El periodista contó anécdotas de la época en la que las redacciones tenían el taller de impresión al fondo "y mucho olor a tinta". Al presentarlos, Lauro Laiño, presidente de la Academia, lo definió como "un feminista precoz", ya que Senén González fue pionero en la cobertura de noticias sobre derechos laborales femeninos desde la sección Gremiales.

Desde 2008, cuando se instituyó este premio anual en reconocimiento al "esfuerzo y la creatividad de quienes contribuyen a dignificar y consolidar la misión de la prensa como institución social y cultural", recibieron la Pluma de Honor Julio María Sanguinetti, Quino, Santiago Kovadloff, Norma Morandini, Bartolomé Luis Mitre, Beatriz Sarlo, Carlos Fayt, Rodolfo Terragno, Natalio Botana, Guillermo Jaim Etcheverry y Albino Gómez.

Estuvieron presentes en la ceremonia integrantes de la Academia, como Magdalena Ruiz Guiñazú, José Ignacio López, Guillermo Jaim Etcheverry, Alicia de Arteaga y Héctor D’Amico. También, Elsa Barber, directora de la Biblioteca Nacional, y amigos del homenajeado, como Daniel Divinsky. Se proyectaron dos videos: uno en homenaje a Sábat y otro institucional, que resume el espíritu del premio.