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Hace algunas horas, la Cámara Federal de Casación Penal confirmó el fallo a perpetua para Alan y William Schlenker, los hermanos que manejaron la barrabrava de River durante varios años. Fue por el crimen de Gonzalo Acro en 2007, asesinado de tres balazos cuando salía de un gimnasio. El fallo fue dividido y los hermanos fueron considerados "instigadores" para el delito.
Alan está preso en el penal de Azul por otro crimen -la muerte de un dealer-, pero su hermano estaba en libertad y ahora quedará detenido en Ezeiza. El mayor de los hermanos habló esta mañana desde la cácrcel y se defendió. Criticó el fallo de los jueces y hasta apuntó contra el ex presidente de River, José María Aguilar, y la policía.
"Estamos sorprendidos. Nuestra defensa había sido muy sólida. Nos trasladan a mí y a mi hermano la instigación por telepatía. Nada determina que fuimos instigadores [del asesinato]. No hay pruebas, no hay indicios, sólo el relato de los jueces", dijo en diálogo con radio Del Plata Alan Schlenker.
En su relato contó que cuando estaban en River no eran "barrabravas tradicionales" y que quisieron "salir del sistema". "Eramos los 'anti-barrabravas'. Yo perdí plata por River, me enfrenté con Aguilar, no fui su brazo armado", sostuvo. Apuntó también contra la policía, que permitió los enfrentamientos entre los grupos que terminó derivando en la muerte de Acro.
"A nosotros nos dan con un caño y los demás gozan de impunidad porque trabajan para el sistema. Este fallo es una barbaridad, es para la prensa y para los que no están en tema. Se violó nuestro derecho a la defensa", indicó.
Alan Schlenker ya lleva más de un año tras las rejas por el crimen de un vendedor de drogas. Ahora recae sobre él la prisión perpetua por el crimen de Acro, aunque según sostuvo hoy buscará "llegar a la Corte Suprema" para rever la sentencia.
tb/av
LA NACION