Copa América: entrenadores maduros y argentinos, el perfil de lo que se verá al borde de la cancha

Las canas pesan a la hora de elegir entrenador y la juventud se cuela en casos excepcionales, así lo sugiere la lista de diez técnicos que dirigirán la Copa América marcada por la juventud de Lionel Scaloni que en Brasil 2021 se codeará con veteranos de mil batallas.

La lista es camaleónica, exjugadores de fama, como el ‘Tigre’ Ricardo Gareca, se codean con estudiosos que conocieron el éxito en el mundo fútbol con planilla en mano. El ‘Maestro’ Oscar Tabárez, entrenador de Uruguay, aparece como el más longevo en edad (74) y en recorrido al dirigir a la selección charrúa desde 2006. Pero otros cinco timoneles tienen sesenta o más años y solo Scaloni (43 años) en Argentina y César Farías (48) en Bolivia están por debajo del medio siglo.

”La experiencia cuenta, pero en toda regla hay excepciones”, comentó a la AFP el exseleccionador uruguayo Jorge Fossati al analizar la posición de Scaloni, que llegó a la selección argentina sin dirigir a ningún equipo y luego de comandar a la Sub 20 de su país. Lejos de menospreciar la valía de la juventud, Fossati separa las aguas y sentencia: “No pasa por la edad, por ejemplo tenemos a Farías que es una persona joven pero como técnico ya tiene recorrido en clubes y otra selección”.

A sus 48 años, Farías dirigirá a una Bolivia que intentará salir del eterno rol de colista al volver a disputar un torneo en el que sorprendió al mundo llevando a Venezuela a alcanzar las semifinales en 2011. El Tijuana del fútbol mexicano, Cerro Porteño de Paraguay y The Strongest de Bolivia son otros renglones de su hoja de vida. Scaloni, de 43 años, “no es el mismo caso”, destacó Fossati, pero es hijo de su tiempo y de las idas y vueltas dirigenciales en la Asociación del Fútbol Argentino, que priorizó el conocimiento y la cercanía del joven entrenador con sus dirigidos, incluido Lionel Messi.

Mandan los argentinos

Al igual que en Brasil 2019, en esta Copa los técnicos argentinos son mayoría. De distintas generaciones, pero con la albiceleste en el corazón, son cuatro de los diez hombres que dirigirán la Copa. Scaloni, al frente de su país, Gareca (63) liderando a Perú, Eduardo Berizzo con Paraguay y Gustavo Alfaro al mando de Ecuador, forman el cuatro de ases argentino.

Mismo país, pero distintos estilos dentro y fuera de la cancha. El ‘Tigre’, carismático exjugador, Berizzo (51), el aguerrido, Alfaro (58), sereno y racional, y Scaloni, el DT que a simple vista pasa como uno más de sus dirigidos. En todos los casos las expectativas varían. Scaloni carga con el peso de una Argentina que sueña con Messi levantando la Copa, para dejar atrás 28 años sin títulos en la absoluta. Gareca quiere volver a creer en un Perú decaído que en la Copa América 2019 fue subcampeón. Berizzo y Alfaro apuntan más a dar rodaje a sus selecciones de cara a lo que queda del premundial.

Una situación similar a la que vive el entrenador de Chile, el uruguayo Martín Lasarte. Flamante timonel de la Roja, bicampeón de América en 2015 y 2016, el charrúa tiene la misión de aprovechar los últimos destellos de la ‘generación dorada’, liderada por Arturo Vidal y Alexis Sánchez (ahora lesionado, no jugará los primeros partidos). Otro urgido de rodaje con sus seleccionados es el portugués José Peseiro, único entrenador europeo de esta Copa, que busca poner a andar a una Venezuela que perdió el encanto de años pasados.

Aplausos a los procesos

En dialogo con la AFP, el veterano entrenador colombiano Francisco Maturana alertó: “Estamos prisioneros de la inmediatez, ahora se habla con facilidad y se minimiza la ley natural, los procesos”. El entrenador que dirigió a Colombia a su única corona en la Copa América, en su casa en 2001, destacó que es vital darle vida a los procesos en la dirección técnica y citó a ejemplos de la región como el de Uruguay con Tabárez y el de Gareca en Perú.

Para Fosati también el conocimiento del plantel es importante y vital el manejo del plantel. ”La virtud principal que tiene que tener un técnico, mucho más un técnico de selección, es saber manejar la parte emocional, saber crearle una mentalidad a su grupo porque de allí en mas vienen los objetivos alcanzados”, sentenció. Una cara que para Fossati ha mostrado y con creces un Tite que convenció a su Brasil de entregarlo todo en el campo, con una táctica que prioriza el orden y el funcionamiento colectivo a los destellos de ‘jogo bonito’ de Neymar y sus compañeros, bien recibidos pero acompañados de mucho trabajo. Tite, el campeón defensor, abrirá el juego en la Copa con su Brasil enfrenando la Venezuela de Peseiro, la primera batalla de la guerra por el título.

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