Cristiano Ronaldo hizo dos goles y ganó su primer título con Al Nassr: dio vuelta el marcador ante Al Hilal y se consagró en el Campeonato de Clubes Árabes

Tiene cierta épica el título logrado por Al Nassr en el Campeonato de Clubes Árabes, y la figura clave para eso fue el portugués Cristiano Ronaldo. El delantero anotó los dos goles y revirtió el marcador adverso en el 2-1 en la final ante Al Hilal para dar la vuelta olímpica en el suplementario, tras comenzar perdiendo y sufrir dos expulsiones. Es el primer título conseguido por CR7 desde su llegada a tierras árabes.

El brasileño Michael puso al frente a Al Hilal a los 6 minutos de la segunda etapa, con un festejo que no le agradó nada al número 7: el goleador lo celebró con el saltito que caracteriza al luso. Y las cosas parecían complicarse todavía más para Al Nassr cuando vio la tarjeta roja Abdulelah Al-Amri a los 26, tras la intervención del VAR. El defensor cometió una falta cuando era el último jugador de campo que separaba a Malcolm del aquero Nawaf Al-Aqidi.

No obstante, cuatro minutos después, Ronaldo consiguió el empate enviando a la red la pelota de frente al arco, adentro del área chica, tras un centro preciso del lateral Sultan Al-Ghanam que no llegó a interceptar el guardameta Mohammed Al-Owais. La jugada había nacido en una falta ejecutada por el arquero de Al Nassr.

El nerviosismo, igualmente, se apoderó de Al Nassr, que a 12 minutos del final sufrió la expulsión del defensor Nawaf Boushal, que estaba en el banco de suplentes. Como si fuera poco, el VAR intercedió para que no se convalidase un penal para Al Hilal y confirmó que Ronaldo estaba adelantado al marcar cerca del pitazo final. Y llegó el tiempo extra.

En el primer tiempo suplementario llegó el gol que resultaría determinante. A los 8 minutos, Cristiano anotó de cabeza, lanzándose casi en palomita, al tomar un rebote del travesaño, para ubicarla entre el defensor que había ido a cubrir el arco y el palo. Fue el desenlace de una jugada que incluyó una salvada previa, en un ataque en velocidad.

Al Nassr resistió en lo que quedaba de juego y el doblete del portugués terminó siendo decisivo en el triunfo y la consagración. Antes, Ronaldo había marcado el 1-0, de penal, en la semifinal del miércoles pasado frente a Al Shorta.

Previamente, había festejado en dos oportunidades en la etapa de grupos (4-1 al US Monastir y 1-1 con Zamalek), lo que le permitió avanzar en el segundo puesto a la siguiente etapa, y por cuartos abrió el marcador en el 3-1 ante Raja. El camino hacia el título se completó con suspenso, como quedó dicho.

Si bien dejó el campo de juego, agotado, a seis minutos del final, Ronaldo volvió a ingresar tras la victoria para levantar la copa y dar la vuelta olímpica en un estadio con una gran algarabía también en las tribunas.

En el círculo central, CR7 levantó la copa número 35 de su carrera. A los 38 años y con 844 goles, sigue festejando. Está vigente, ahora en tierras árabes, y su celebración fue también una bienvenida exitosa para el senegalés Sadio Mané, que se incorporó al equipo esta temporada.

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