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La goleada por 5-0 ante Albania en el mítico estadio de Wembley hace que Inglaterra esté prácticamente clasificada al mundial de Qatar. Tiene una diferencia de gol de +26 y le lleva tres puntos a su escolta en el grupo I, Polonia, que también ganó por un amplio margen: 4-1 de visitante a Andorra. La zona se definirá el lunes con Polonia vs. Hungría y San Marino vs. Inglaterra. Los inventores del fútbol tendrían que perder y Polonia golear para que se inviertan las posiciones.
La catedral del fútbol inglés fue el teatro de un partido sin equivalencias. Porque Inglaterra, dirigida por Gareth Southgate, se tomó apenas 9 minutos para anotar el primer gol. Fue por intermedio de Harry Maguire, el recio defensor que parece haber encontrado en su selección la tranquilidad que escasea en su club, Manchester United. Luego, el vendaval de goles: triplete de Harry Kane y otro de Jordan Henderson, el futbolista-símbolo de Liverpool.
Southgate es una especie de Lionel Scaloni en versión inglesa. Nunca fue primera opción para hacerse cargo de un equipo con pesos pesados en el vestuario. Y su trayectoria como entrenador en la Premier League no le daba los pergaminos suficientes como para aterrizar en el equipo que representa a todo un país. Sin embargo, allí está. Al frente de un equipo que tiene hace años un estilo propio y en el que jóvenes e históricos se amalgaman a la perfección. Ese trabajo será premiado esta semana: la FA inglesa ya anunció su intención de renovarle el contrato al entrenador. Su vínculo actual vence después de Qatar 2022. Además, los ejecutivos pretenden duplicarle el sueldo: de cerca de 6 millones de dólares, el ex defensor central pasaría a ganar cerca de 12 millones de la moneda estadounidense.
El partido con los albaneses aportó una curiosidad: los cinco goles fueron anotados en el primer tiempo, por lo que la segunda parte estuvo de más. Los dos terminaron satisfechos: los locales porque encarrilaron su clasificación a Qatar y les bastará un punto el lunes para certificarla. Y los visitantes, porque evitaron una goleada de proporciones que hubiera entrado en la historia.
En otros partidos, Italia y Suiza alargaron la definición del grupo C. Igualaron 1-1 en el estadio Olímpico de Roma. Emparejados en puntos (15), la definición de la zona quedará para el lunes: la Azzurra viaja a Irlanda del Norte, mientras que los helvéticos reciben a Bulgaria. En el gurpo F, que ya tenía a Dinamarca clasificada al Mundial, confirmó como segundo a Escocia, que le ganó 2-0 a Moldavia y sacó su pasaje al repechaje.