La Justicia fue implacable: Juventus se quedó sin dos títulos y descendió

ROMA.- En la historia del deporte no hay precedente de una sanción semejante en cantidad de clubes implicados, importancia de éstos y volumen de la pena. El escándalo de corrupción en el fútbol italiano tuvo ayer una dura sentencia de la justicia deportiva de ese país: Juventus fue despojado de los títulos de las últimas dos temporadas y, además, perdió la categoría por primera vez en su historia. Igual destino tendrán Lazio y Fiorentina, que jugarán en la serie B, mientras que Milan se quedará en la primera división, pero no podrá jugar la próxima Liga de Campeones al sufrir el descuento de 44 puntos del último torneo. Este desastre del calcio llega tan sólo cinco días después del título mundial en Alemania.

Y hay más: al descender Juventus, Lazio y Fiorentina, recuperan su lugar en primera Lecce, Treviso y Messina. En cuanto a las multas, Juventus deberá pagar 80.000 euros; Fiorentina, 50.000; Lazio, 40.000, y Milan, 30.000.

Según el veredicto que dio a conocer el presidente de la Comisión de Apelación Federal, Cesare Ruperto, Juventus fue el mayor partícipe en el escándalo y por ende recibió también una quita de 30 puntos para la próxima temporada, mientras que Lazio y Fiorentina sufrieron castigos de 7 y 12 puntos, respectivamente. Se espera que los clubes apelen la decisión. Italia tiene tiempo hasta el 25 de julio para presentar a sus participantes para los certámenes continentales. Por lo pronto, no hubo definiciones sobre los títulos desiertos: Roberto Mancini, el DT de Inter, tercero en el último torneo -detrás de Juventus y Milan- y que no sale campeón desde 1989, ya reclamó el título.

La causa comenzó de manera oficial el 2 de mayo último, cuando después de rumores sobre escuchas telefónicas, la Federación Italiana rompió el silencio y anunció que abrió una investigación en marzo al respecto. Así, salió a la luz una relación de complicidad inquietante entre el director general de Juventus, Luciano Moggi, y un responsable de la Federación Italiana encargado de designar a los árbitros. Todos salpicados por escuchas telefónicas en las que se decidían los árbitros de los partidos y otros intercambios de favores. Desde entonces y antes de conocer el veredicto final, hubo renuncias masivas en la cúpula de Juventus y de dirigentes arbitrales.

El fallo, además de involucrar a los clubes, también incluye inhabilitaciones para ocupar cargos deportivos a once dirigentes, con Moggi a la cabeza con cinco años y una multa simbólica de 50.000 euros. Franco Carraro, ex presidente de la Federación, recibió una suspensión de cuatro años y medio, al igual que el árbitro Massimo De Santis, que era el referí mundialista. En total fueron juzgados 26 dirigentes, pero ningún futbolista.

El fiscal acusó a los inculpados de haber violado los artículos 1 y 6 del Código de Justicia Deportiva. El primero se refiere a la obligación de observar los principios de "lealtad y corrección", y el segundo a las "acciones dirigidas a alterar el desarrollo o resultado de un partido" y asegurar una ventaja en la clasificación.

El dictamen establece que Moggi, director de Juventus, en sociedad con el presidente, Antonio Giraudo, fue el cabecilla de una mafia dedicada a manipular los arbitrajes de los partidos, en cercana complicidad con el árbitro De Santis, y habría decidido qué árbitros dirigían los partidos de la Juventus. Los dueños de la Fiorentina, Diego y Andrea Valle, fueron acusados de adherirse al sistema de Moggi, con el fin de evitar el descenso, al igual que Lazio, que también peleaba por la permanencia. Milan fue acusado de mantener relaciones con Moggi por intermedio del manager Leonardo Meani, para obtener ayuda en al menos un partido.

Toda la causa estuvo inmersa en derivaciones de todo tipo, tanto que fue anunciada ayer a las 20 hora italiana, para evitar una caída abrupta de la Bolsa de los implicados. Es más: la decisión acusatoria del fiscal federativo Stefano Palazzi se conoció una vez concluido el partido de Italia contra República Checa en el Mundial, el 22 del mes último (victoria de los campeones por 2-0), para no influir negativamente en el rendimiento de los jugadores.

El escándalo además podría arruinar por completo las expectativas de Italia de organizar la Eurocopa de fútbol de 2012.

• La medida afectó a 13 campeones mundiales
  
  Trece futbolistas, sobre los 23 campeones mundiales en Alemania, pertenecen a los clubes involucrados en el escándalo: Buffon, Cannavaro, Zambrotta, Camoranesi y Del Piero, juegan en Juventus; Nesta, Gattuso, Pirlo, Gilardino e Inzaghi, en Milan; Peruzzi y Oddo, en Lazio; y Toni, en Fiorentina.

Juventus

Fundado en Turín en 1897, es el club más poderoso de Italia, ahora con 27 conquistas del scudetto. Como mayor implicado, la Justicia le quitó los títulos de 2005 y 2006, lo mandó a la serie B y comenzará el torneo en esa categoría con una quita de 30 puntos.

Fiorentina

Se creó en 1926, en Florencia, y ganó dos veces la liga italiana, en 1956 y 1969. Fue condenado al descenso y recibirá una quita de 12 unidades, porque se consideró al club como cómplice de los hechos que se le adjudicaron principalmente a Juventus.

Lazio

Fundado en Roma en 1900, fue dos veces campeón de Italia: en 1974 y en 2000 (con Diego Simeone y Juan Sebastián Verón). Recibió un castigo de descenso de categoría más el descuento de siete unidades, porque también se lo juzgó como cómplice del conjunto de Turín.

Milán

Fundado en 1899 en Milán, es otro poderoso del país, con 17 títulos de liga y, además, 15 festejos internacionales. Fue el menos perjudicado: le sacaron 44 puntos del último torneo (no podrá jugar la Liga de Campeones), 15 en la próxima temporada y otros tantos en la 2007/2008.