Un San Lorenzo sin dueño, pero con gol: Soso en el palco, Tocalli en el banco y Monarriz en la reserva

Un Ciclón que todavía no tiene dueño ganó su tercer partido seguido. Lo hizo en Paraná, ante Patronato (3-1), por la primera fecha de la Copa Superliga, luego de finalizar su participación en el certamen local con triunfos consecutivos ante Aldosivi (3-1) y Lanús (4-3). La racha positiva se da bajo la conducción interina de Hugo Tocalli y Leandro Romagnoli.

Mariano Soso todavía no dirige a San Lorenzo, pero ya piensa como tal. Por la noche observó desde un palco en Entre Ríos el partido con Patronato, tomó nota de características individuales de algunos de sus próximos dirigidos, también resaltó cuestiones positivas y aspectos a corregir. Horas antes, también se dio una vuelta por el Predio La Capillita, para seguir de cerca a la Reserva del Ciclón, que le ganó al equipo entrerriano 1-0 con un gol de Alexis Sabella, de penal.

Paradojas del destino, justo ayer volvió a dirigir la Reserva Diego Monarriz, quien hasta hace poco era el entrenador de la primera del Ciclón, aunque flojos resultados, un funcionamiento endeble y el conflicto generado con los hermanos Oscar y Ángel Romero hicieron muy inestable su (corto) proyecto. San Lorenzo se acostumbró a depender demasiado del futuro, ya que quemó etapas con directores técnicos interinos que luego no los sostuvo: primero Claudio Biaggio, luego Monarriz, ahora tomaron las riendas para "dar una mano" Hugo Tocalli y el mánager Leandro Romagnoli. Sin embargo, Soso no tiene fecha confirmada para el debut (más allá de lo que suceda en los próximos días con los calendarios y la Copa Superliga ante el avance del Coronavirus) y allí radica una de las principales dudas.

¿Qué falta para que asuma Soso? Como si el Ciclón estuviera en una posición cómoda y le sobrara tiempo, pero todavía restan detalles. Lo cierto es que ayer Soso tuvo una oportunidad inmejorable para tomar un café con Monarriz y aprovechar su punto de vista sobre el plantel que va a recibir. No tiene por qué Soso tomar al pie de la letra o como una verdad absoluta todo lo que le cuente el ex DT, pero sería muy valioso tomarlo como referencia, como punto de partida de alguien que hasta hace muy poco compartió horas de entrenamientos y partidos, por más que luego el propio Soso le dé más importancia a sus propias sensaciones.

Justamente el aporte de los hermanos Romero será uno de los puntos en donde Soso más tendrá que trabajar. El de este viernes fue el partido Nº 20 que los Romero jugaron juntos en San Lorenzo. Tienen jerarquía, pero en el global todavía están muy lejos de lo que pueden ofrecerle al equipo. Pero en Entre Ríos quedó claro que si entran mucho en juego, hay más posibilidades de que el conjunto azulgrana gane.

Oscar Romero fue clave con una asistencia vertical para el pique de Bareiro (que definió ante la floja salida de Ibáñez) en el primer tiempo (diez minutos después de haber sufrido el 0-1 de Chicco) y Ángel pudo marcar de zurda a los 50 segundos del segundo tiempo, pero Ibáñez le mandó la pelota al córner. De todas formas, uno de los Romero (Oscar) tenía guardado un as en la manga a siete minutos del final: tras una jugada del ingresado Gaich, batió a Ibáñez y desató el festejo de todo San Lorenzo. Y ni que hablar cuando el propio Oscar Romero anotó el tercero (desde emboquillada y desde muy lejos) el 3-1.

Patronato, fiel al estilo del entrenador Gustavo Álvarez, jugó con un estilo protagonista: un esquema 4-3-3 con tres puntas definidas: Lautaro Comas, Silveira y Tarragona. Hizo un golazo de tiro libre con el ex Boca Julián Chicco, y luego siguió buscando el arco rival. Le generó algunas complicaciones extras al Ciclón con el juego aéreo, con cabezazos que pudieron ser más peligrosos de lo que terminaron siendo a las espaldas de Coloccini y Gonzalo Rodríguez.

Lo que San Lorenzo necesita es dejar de dar vueltas en el carrusel de los entrenadores. El día que Monarriz volvió a la reserva y Tocalli le dio (con Romangoli) el tercer éxito seguido al Ciclón, Soso hizo doble turno y tomó notas futboleras desde un palco. Más allá de los diez goles en los últimos tres partidos, da la impresión que el equipo está pidiendo un líder convencido que tome las riendas. Será Soso, aunque todavía no se sabe cuándo asumirá.