Perú se queda sin Mundial, pero quiere seguir con Ricardo Gareca

EKATERIMBURGO.- "Teníamos otras expectativas, pero estoy conforme con lo que entregó el equipo en estos dos partidos. Dio todo, no tengo nada que reprocharle en cuanto a la imagen dada, al menos para mí". El Flaco Ricardo Gareca siempre tiene un gesto adusto, raramente deja traslucir sus emociones. Su expresión no era más grave porque media hora antes Perú había quedado eliminado del Mundial, tras otra derrota por 1-0, ahora ante Francia. 180 minutos sin convertir goles.

Le queda el encuentro de despedida frente a Australia al ciclo de tres años y medio que lleva Gareca. ¿Continuará? De parte de la Federación Peruana de Fútbol no hay dudas, están muy satisfechos y ya le ofrecieron la renovación al entrenador que no sólo devolvió a Perú a un Mundial después de 36 años, sino que también le cambió la cara a una selección que en décadas anteriores era más noticia por actos de indisciplina.

Perú se reposicionó deportivamente, se transformó en un ejemplo a seguir para el fútbol peruano en general en cuanto a organización, seriedad, trabajo de base. Eso trajo aparejado un crecimiento económico alrededor del producto selección. Gareca es artífice de todo eso, comprometió a la dirigencia a lograrlo, pero por ahora es una incógnita si está dispuesto a prolongar el proyecto.

"Todos se tienen que dar cuenta en Perú de que tienen un potencial enorme y se debe capitalizar esta experiencia del Mundial. De cara al futuro, si la selección recibe el apoyo debido, puede seguir mejorando". Gareca dio ayer el consejo, pero por ahora no se involucra, habló como si tomara distancia.

Un rato antes, más de 20.000 peruanos hicieron que el Ekaterimburgo Arena pareciera el Nacional de Lima, lo vistieron de rojo y blanco en las cuatro tribunas. Aliento constante y apoyo para que Francia se sintiera más visitante. El empuje no fue suficiente para que el equipo de Ricardo Gareca se curara de su sequía de gol y evitara la eliminación. "Cómo no te voy a querer…", cantaron los hinchas a modo de himno, un reconocimiento a un equipo más armónico que contundente, bien trazado, pero sin pólvora. No bastó con la titularidad de Guerrero y que Farfán lo acompañara en el segundo tiempo. Francia impuso su mayor jerarquía en el primer tiempo, luego cayó mucho su nivel y se llevó un ajustado 1-0, que le da el pasaje a los octavos de final.

Gareca también tuvo palabras para el acompañamiento masivo: "La gente estuvo increíble, me duele por ellos no haber tenido al menos la posibilidad de pelear por la clasificación hasta la última fecha. No pudimos retribuirle el apoyo y la confianza que nos dieron. Esperemos en el último partido darles la chance de festejar un gol"

Se le hizo corta y efímera a Perú la vuelta a un Mundial. Tras una espera de 38 años, en cinco días le sellaron el boleto de salida de Rusia. Sólo le queda el partido ante Australia a modo de despedida. Si contra Dinamarca había sentido que la derrota fue un castigo excesivo, frente a Francia no le quedó otra que admitir su inferioridad en la primera etapa, cuando se decidió el resultado. No pudo contra la mayor potencia, velocidad y recursos técnicos del equipo de Didier Deschamps.

Hubo una diferencia de categoría evidente en todas las líneas en esos primeros 45 minutos. Dos sintonías de juego distintas. El toque acompasado de Perú, mayormente inofensivo, contra la aceleración que le imprimía Francia, que tenía en Mbappe y Griezmann a dos flechas lanzadas en cuanto encontraban espacios. Con Pogba de lanzador; el volante de Manchester United, en su momento el pase más caro del mundo, no es un organizador clásico, cerebral y con sentido de la pausa, pero tiene buen toque de pelota y ojo para asistir.

Tras un aceptable comienzo, el partido se le hizo muy cuesta arriba a Perú. Perdía los choques individuales, ganar metros del campo le resultaba muy dificultoso. Mientras, Francia se sentía cada vez más dominador, pero a veces sobraba la situación con algunos lujos que improductivos. Gallese empezó a verse exigido por Mbappe, Griezmann y Giroud.

Ahogado, Guerrero perdió una pelota en una salida, Pogba habilitó a Giroud, su remate se desvió en Rodríguez y la definición le quedó a Mbappe. Perú solo había podido preocupar con un anticipo del reaparecido Guerrero a Umtiti que tapó Lloris.

Era demasiado poco y Gareca puso a un delantero más ( Farfán) y quitó a un volante de contención (Yotún). Perú ocupó más el campo rival y llegó con peligrosos remates de media distancia. Francia, equipo irregular y por momentos imprevisible, pasó a aguantar cerca de su arco. Tuvo algunas aproximaciones Perú, con los desbordes de Carrillo por la derecha, pero sin pegada ni sincronización dentro del área.

Otro rendimiento digno sin premio en el resultado, con Gareca entrando al campo entrando al campo a consolar a algunos jugadores. Al frío atardecer de Ekaterimburgo, una multitud peruana le puso calor, gritó, se fue afónica, pero se quedó sin cantar el gol que le diera vida al equipo en el Mundial.