Súper Rugby. Jaguares y una chance inmejorable para dar el golpe en Nueva Zelanda

Crisis es oportunidad. Un axioma utilizado en la economía del que Jaguares debe asirse. Apelando a alguna licencia literaria, ciertamente. En este caso la crisis no es propia, tal el cometido de esta máxima, sino del rival. Blues viene en caída y el partido de mañana se presenta como un escenario inmejorable de conseguir el primer triunfo ante un equipo neozelandés en el Súper Rugby.

En la madrugada del sábado (4.35 de la Argentina), Jaguares se enfrentará en el Eden Park al equipo de Auckland en procura de cortar una racha de siete derrotas en igual cantidad de enfrentamientos ante equipos de Nueva Zelanda. Por evolución, rendimiento y resultados, la franquicia argentina está en el mejor momento de su corta existencia y está en condiciones de explotar el bajón de Blues.

Los éxitos consecutivos en Australia ante Rebels y Brumbies inflaron de confianza a Jaguares, dos triunfos que ratifican el crecimiento que había evidenciado en los anteriores cuatro partidos en casa, aunque con irregularidades que les costaron golpes duros, como la derrota ante Reds y la goleada frente a Crusaders. Esa inestabilidad hoy parece haber quedado en el pasado, pero debe reafirmarse semana a semana, algo que requiere de entrega y concentración máximas cuando enfrente está la elite del hemisferio sur. Blues no es la excepción, pero no está en su mejor momento.

Como todo equipo de Nueva Zelanda, el conjunto de la capital es de temer. Su poder físico y capacidad de desequilibrio ofensivo son temibles, y la gran mayoría de sus integrantes podrían integrar el seleccionado de los All Blacks. Sin embargo, de las cinco franquicias de aquel país es la menos fuerte. En las últimas cuatro temporadas finalizó último en su conferencia y no se clasifica a los playoffs desde 2011.

Esta campaña no es la excepción, ya que con dos triunfos y seis reveses marcha quinto de cinco en la zona. Entre los equipos que lo vencieron están Stormers y Sharks, dos sudafricanos; los últimos se impusieron 63-40 cuatro fechas atrás en Auckland. El CEO Michael Redman tuvo que salir en la semana a respaldar al entrenador Tana Umaga. Además, está plagado de lesionados. Mañana no jugarán la estrella Sonny Bill Williams, el ala Jerome Kaino, el medio-scrum Augustine Pulu (va al banco), el centro George Moala, el wing Melani Nanai, el segunda línea Patrick Tuipulotu y el apertura Otere Black, por nombrar los que tienen experiencia internacional.

No obstante, no deja de ser una potencia. Es el segundo máximo ganador en el Súper Rugby con tres títulos y tiene a uno de los jugadores más desequilibrantes del mundo en la actualidad como el polifuncional back Rieko Ioane, además de su hermano Akira, el octavo.

"Se está hablando mucho de que es un equipo inestable y viene perdiendo, pero la realidad es que es un equipo neozelandés, que tiene muchos All Blacks, muchos isleños que de la nada te pueden hacer una jugada fantástica", opinó Jerónimo de la Fuente en ESPN. "No hay que subestimarlos, es un equipo tremendo."

Jaguares y Blues ya se enfrentaron en una ocasión, dos años atrás también en Eden Park. Aquella vez, el equipo argentino jugó media hora de ensueño, dominando de manera absoluta, moviendo la pelota de todos lados, quebrando la defensa rival con asiduidad y hasta provocando una amonestación al rival. Pero en ese lapso solo consiguió seis puntos, y Blues en la primera que tuvo llegó al try. Entre la frustración y el desgaste, Jaguares terminó perdiendo 24-16. Una constante de tiempo no tan lejanos.

El equipo que ahora dirige Mario Ledesma es más práctico, más sólido en defensa, más fuerte mentalmente y además conserva la capacidad de desequilibrio en la ofensiva.

Para este encuentro, el entrenador volvió a rotar. Además de los cambios obligados (Delguy por Moyano y Senatore por Matera), confió nuevamente en Martín Landajo como 9 y le devolvió la titularidad a Matías Alemanno, aunque mantuvo a Guido Petti Pagadizábal, la figura ante Brumbies, y sacó a Tomás Lavanini.

"Blues va a salir a redoblar la apuesta. Creo que los primeros 20 minutos van a ser determinantes, ellos van a salir a tirar todo. Nosotros tenemos que salir a jugar tranquilos y pensar más en nuestro equipo que en el de ellos", afirmó Nicolás Sánchez, de gran rendimiento en los últimos partidos. "Las formaciones fijas van a ser fundamentales. Si tenemos la pelota podemos controlar más el juego y no entrar en el desorden de entrar en el cambio de posesión, porque estos equipos lo aprovechan muy bien".

El mejor momento de Jaguares, la crisis de Blues. La oportunidad es inmejorable. Llevarlo a la cancha equivaldrá a dar un nuevo salto de calidad.

Las formaciones

• Blues: Matt Duffie; Jordan Hyland, Orbyn Leger, Rieko Ioane y Tumua Manu; Stephen Perofeta y Jonathan Ruru; Kara Pryor, Akira Ioane y Dalton Papalii; Josh Goodhue y Gerard Cowley-Tuioti; Sione Mafileo, James Parsons (c) y Pauliasi Manu.
• Entrenador: Tana Umaga.
• Suplentes: Leni Apisai, Ross Wright, Mike Tamoaieta, Ben Nee-Nee, Lyndon Dunshea, Augustine Pulu, Dan Kirkpatrick y Terrence Hepetema.
• Jaguares: Joaquín Tuculet (c); Bautista Delguy, Matías Orlando, Jerónimo de La Fuente y Emiliano Boffelli; Nicolás Sánchez y Martín Landajo; Javier Ortega Desio, Leonardo Senatore y Marcos Kremer; Matias Alemanno y Guido Petti Pagadizábal; Nahuel Tetaz Chaparro, Agustín Creevy y Santiago García Botta.
• Entrenador: Mario Ledesma
• Suplentes: Julián Montoya, Javier Díaz, Juan Pablo Zeiss, Tomás Lavanini, Tomás Lezana, Gonzalo Bertranou, Bautista Ezcurra y Sebastián Cancelliere.
• Inicio: 19.35 local (4.35 del sábado en la Argentina)
• TV: ESPN2
• Cancha: Eden Park, Auckland
• Árbitro: Paul Williams (Nueva Zelanda)