Asumen nuevos funcionarios en la AFIP
La Dirección General de Aduanas (DGA) pasará hoy al control directo del ministro de Economía, Domingo Cavallo, con la asunción, al frente del organismo, de uno de sus hombres de confianza: César Albrisi, hasta el momento diputado nacional de Acción por la República de Córdoba, en reemplazo de Eduardo Cassullo.
El anuncio surge como un eco de la reciente entrada en funciones de Armando Caro Figueroa al frente de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), organismo madre de la Aduana, y de la confirmación de Horacio Rodríguez Larreta (h), como titular de la Dirección General Impositiva (DGI). Ambos asumirán hoy a las 16 en la sede de la AFIP, en el edificio del ex Banco Hipotecario.
Además, representa la vuelta a la órbita de Cavallo de un organismo que le causó no pocos dolores de cabeza en el pasado. En 1996, la causa judicial conocida como la "aduana paralela" que promovía la investigación de supuestas irregularidades en el organismo, comprometió al cavallista Gustavo Parino, entonces a cargo de la Aduana.
Parino fue absuelto, pero la causa judicial fue uno de los factores que influyó en el alejamiento del ministro del gobierno de Carlos Menem, según reconocieron en su entorno. La tarea que le espera a Albrisi al frente de la DGA no es menor. Ingresa en momentos en los cuales el Gobierno quiere dar señales contundentes a los mercados de que la política de "déficit cero" va en serio.
Y justamente, se estima que existe una cuantiosa evasión (algunos legisladores hablan de hasta 7000 millones de dólares al año) en las operaciones de comercio exterior, a causa de actos ilícitos como el contrabando y la subfacturación, cuyo combate está a cargo de la Aduana.
Además, según algunos analistas, el incentivo a la evasión en las importaciones de los productos sensibles está en alza porque el mismo Cavallo decidió elevar el arancel externo común (AEC) de los bienes de consumo del 23% promedio al 28 por ciento. El costo sube al 35%, si se tiene en cuenta la incidencia del factor de convergencia.
También es cierto que aún existen procesos engorrosos para tramitar importaciones y exportaciones que generan costos extra sin contribuir a mejorar el control e impactan negativamente en la actividad económica. Tal vez por eso, Cavallo anticipó recientemente que la Aduana será uno de los pilares de la nueva reforma del Estado junto con otros organismos actualmente muy cuestionados, como el PAMI y la Anses.
"Vamos a trabajar para lograr una aduana sin papeles. Convocaremos a todos los sectores interesados en el mejoramiento del organismo para solucionar problemas", dijeron a LA NACION en el entorno del ministro. Albrisi, vicepresidente del Bloque de Acción por la República, llega al cargo tras ocupar la presidencia de la Cámara de Industriales Metalúrgicos de Córdoba y del Consejo Argentino de la Industria.