Se trata de un campo en Santiago del Estero donde una comunidad, con el respaldo del Mocase, reclamaba una presencia “desde tiempos inmemoriales”
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SANTIAGO DEL ESTERO.- En un acuerdo firmado días atrás en esta provincia, Norberto Milei, padre del presidente Javier Milei, cedió casi 3000 hectáreas de tierras a campesinos santiagueños luego de un largo litigio que arrancó en 1995 y donde intervino el Movimiento Campesino de Santiago del Estero (Mocase) que le dio amplia difusión a este acuerdo y lo mostró como “un triunfo de la lucha campesina”.
El acuerdo, que contó con la participación y mediación de la Mesa de Diálogo y Tierra del gobierno local, se firmó en una escribanía de Añatuya con la presencia de Norberto Milei, padre del primero mandatario nacional y presidente de la firma La Ponderosa SA, empresa agropecuaria que se dedica a los cultivos de algodón, maíz y trigo, y los referentes del Mocase y habitantes de la zona de Pampa Atún, en el departamento Mitre del interior santiagueño, casi en el límite con Santa Fe. Se trata de una región de buenas tierras, aptas para los cultivos mencionados antes. El departamento donde produce Milei está rodeado de otros también productivos como Aguirre, Quebrachos, Rivadavia y Salavinas.
El campo posee un total de 2800 hectáreas las cuales estaban en litigio desde 1995 entre esta sociedad anónima encabezada por Milei y las familias que afirmaban vivir en el lugar “desde tiempos inmemoriales” y que hoy lo siguen haciendo. Estas tierras eran reclamadas por la Comunidad Indígena Sentimiento de Mi Tierra del Pueblo Originario Sanavirón, que forma parte del Movimiento Campesino de Santiago del Estero.
Milei y los integrantes de la comunidad y el movimiento lograron sellar un acuerdo que le puso fin a un conflicto legal que ya llevaba tres décadas. El Mocase, organización campesina que se empezó a gestar a fines de la década del 80 y que se formalizó el 4 de agosto de 1990, nuclea a miles de familias de campesinos y pequeños productores. Tuvo etapas de radicalización y de graves enfrentamientos con el uso de armas de fuego contra grupos que denominaban “terratenientes”. Con el correr de los años fueron tomando una postura más dialoguista y hoy mantienen fuertes vínculos políticos y de diálogo con el gobernador Gerardo Zamora.
Según pudo saber este medio, Milei compró el campo en cuestión a mediados de los 90 cuando aún la Dirección de Catastro de la provincia no estaba modernizada como hoy y las adjudicaciones directas, indicaron, que generaban matrículas que no tienen que ver con el registro posesorio, eran moneda corriente.
Pero, en rigor, la presencia de Norberto Milei en Santiago del Estero venía de larga data, ya que en la zona de Pinto y Malbrán, pueblos que forman parte del corredor de la ruta nacional 34, él tenía emprendimientos ganaderos para luego, con La Ponderosa SA, hacerse de este campo que estuvo en litigio 30 años. El padre del jefe de Estado es una persona conocida y respetada en Pinto, donde como todo productor acude a hacer compras de insumos. Recién ahora, por la condición de presidente de su hijo Javier, anda con un custodio, pero es una persona de perfil bajo.
A este medio contaron que días atrás, en la escribanía de la ciudad de Añatuya, la escribana, antes de las firmas, lo saludó afectuosamente y le dijo: “¿Don Beto, se acuerda cuando hicimos ese poder aquí? Mire usted, que me iba a imaginar que su hijo iba a ser presidente”.
En este marco, el comunicado oficial emitido por el Mocase tras la cesión de Milei indicó: “Se firmó el convenio transaccional mediante el cual la Comunidad Indígena y la empresa acuerdan la resolución del conflicto, definiendo las tareas a llevar adelante por cada una de las partes, y teniendo como garante del acuerdo a la organización campesina”. La organización tomó, además del papel de defensa de las familias, el rol de interlocutor y garante del acuerdo.
La Ponderosa SA reclamaba una escritura de un poco menos de 6000 hectáreas. En esa superficie, según la organización campesina, “estaban las viviendas históricas de las familias, corrales, potreros, el pastoreo de los animales, cercos de frutas y verduras, y demás mejoras productivas. Es decir, encerraba el territorio donde la comunidad desarrolla su producción y su vida plena”. Norberto Milei terminó cediendo casi la mitad de las hectáreas en disputa, poniéndole fin a casi 30 años de conflicto.
Situación
La comunidad indígena en cuestión, que forma parte del Mocase, fue reconocida, años atrás, por el gobierno nacional en el marco del Relevamiento Territorial de Comunidades Indígenas que fue promovido por el kirchnerismo como parte del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas y el acuerdo alcanzado abarca el “reconocimiento de la totalidad de las hectáreas incluidas”.
Además de los escribanos que le dieron fe y legalidad al acta allí firmada y la presencia de Norberto Milei, junto a los delegados del Movimiento Campesino de Santiago del Estero, Adolfo Farías y Antonio Campana, estuvieron también Gonzalo Galván, Enrique Acosta, Irma Aguirre y Román Guerreros, todos consejeros de la Comunidad Indígena Sentimiento de Mi Tierra del Pueblo Originario Sanavirón.
“El convenio firmado representa un logro histórico para la organización y para las comunidades indígenas en nuestra provincia. Significa la seguridad y tranquilidad inmensa de las familias de no tener que volver a afrontar un desalojo, ni los miembros actuales, ni las generaciones futuras. Significa el paso de una situación de conflicto a una convivencia pacífica, que garantiza el bienestar y el desarrollo de una producción y una vida plena para los hijos, nietos, y demás generaciones de la Comunidad Indígena Pampa Atún”. LA NACION intentó obtener la palabra del gobierno nacional sobre la acción realizada por el padre del presidente Milei, pero al cierre de esta nota no obtuvo respuestas.
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