Miguel Bein: un economista distinto, abierto, pragmático y antigrieta
El ex funcionario y consultor fue recordado en las redes por distintos colegas; todos destacaron su gran calidad profesional y humana
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LA NACION
Conocida la noticia de la muerte del economista y exfuncionario Miguel Bein, distintos colegas se volcaron a la red social Twitter para despedirlo y destacaron de forma unánime su gran calidad profesional y humana. Bein falleció hoy, tras una operación de un cáncer de laringe que lo afectaba desde hacía varios años.
Licenciado en Economía de la Universidad de Buenos Aires, continuó con su formación en la escuela de negocios de la Universidad de Harvard y tenía un máster en Finanzas de la Universidad Torcuato Di Tella y otro de la Universidad de Ciencias Empresariales y Sociales (UCES).
Bein pasó por la función pública donde fue, en primer lugar, subsecretario de la Pequeña y Mediana Empresa durante la presidencia de Raúl Alfonsín, en el equipo del entonces secretario de Industria, Roberto Lavagna.
Luego, en 1999, se desempeñó como viceministro de Economía de José Luis Machinea en tiempos del gobierno de Fernando de la Rúa, con el cargo formal de secretario de Política Económica.
También accedió a importantes posiciones en empresas privadas de primera línea, al tiempo que se perfiló como consultor de empresas, bancos y de distintos niveles de gobierno. Entre 1995 y 1999 fue socio del estudio Machinea, Bein & Asociados, que dejó de funcionar cuando ambos ingresaron a la gestión pública.
En 2005 fundó el estudio Bein & Asociados, que hoy dirige su exsocia Marina Dal Poggeto junto a Federico Furiase y Martín Vauthier bajo el nombre de EcoGo Consultores.
“Era un distinto. Tenía esa combinación de inteligencia, dedicación extrema y una astucia de la buena que marcaba un diferencial tremendo”, contó Furiase a LA NACION. Él trabajó junto a Bein desde 2008 hasta 2017, cuando el exfuncionario dio un paso al costado. Sin embargo, nunca se perdió el contacto.
“Era un tipazo, pero lo que marcaba la diferencia era esa visión, ese olfato para interpretar lo que pasaba y predecir lo que se venía independientemente del contexto político. Nadie lo podía influenciar. Era un antigrieta y tenía esa combinación de análisis macro leyendo el contexto político y los mercados, lo que le daba un diferencial enorme frente a la mayoría de los economistas, sumado a su experiencia en el sector público y privado”, prosiguió.
Al mismo tiempo, dijo que era un obsesivo de los números que estaba en el mínimo detalle. “Te llamaba para ver en cuánto estaba el dato del PBI de tal trimestre, la inflación o pidiéndote datos del mercado. Era un animal y fue mi maestro y se lo pude decir hace poquito”, concluyó.
Por su parte, el economista y decano de la Escuela de Gobierno de la Di Tella, Eduardo Levy Yeyati, lo calificó como un economista agudo que siempre intentaba pensar fuera de los lugares comunes y que tenía fe en que el país podía enderezarse y salir del pozo. “Su optimismo estaba guiado por esa convicción”, agregó.
En redes quien también se despidió de él fue el embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli, de quien Bein fue asesor económico durante la campaña presidencial de 2015.
“Lamento el fallecimiento del destacado economista Miguel Bein. Un profesional de larga trayectoria. Envío mis condolencias a sus familiares y amigos”, escribió.
En los últimos años Bein se había volcado a la producción agropecuaria supervisando el campo que explotaba en el partido bonaerense de Chacabuco. Deja a su mujer Olga Rébori y a sus tres hijos Tomás, Iván y Victoria.
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