Naftas: el año terminaría con un nuevo incremento, el quinto en cuatro meses
LA NACION
La segunda mitad del año llegó cargada de aumentos en materia de naftas. No es para menos, la principal fuentes de ingresos de YPF es la venta de combustibles y necesita de fondos frescos para invertir en la producción de petróleo y gas, sobre todo en un contexto complicado para el acceso a financiamiento en el mercado externo de deuda.
El quinto incremento de nafta y gasoil del año (todos concentrados en los último cuatro meses) llegaría el 16 de diciembre, fecha para la cual la Secretaría de Energía pospuso el aumento del impuesto a los combustibles líquidos (ICL) y al dióxido de carbono. Esta actualización tributaria impactaría en los valores del surtidor en un 1%, según cálculos de la consultora Energy Consilium, pero las empresas podrían aprovechar para realizar un alza mayor y ganar la rentabilidad que perdieron con la devaluación mensual.
"La suba que faltaba aplicar conforme a la ley era la variación del índice de precios al consumidor (IPC) del segundo y tercer trimestre del año, que arrojaba un aumento del impuesto del 13,4%, y que implicaba subas de precios en el surtidor del 2,2% y 1,4 % en Ciudad de Buenos Aires (CABA). Por el decreto 965, decidieron aplicar la actualización correspondiente al segundo trimestre el 16 próximo y dejar en suspenso cualquier otro aumento hasta el 15 de enero", explicó el director de la consultora Juan José Aranguren.
En lo que va del semestre, los combustibles llevan aumentados 14,8% a nivel país y 19,3% en CABA. El último incremento se produjo el 23 de noviembre y fue de un 2,5% promedio país.
El mercado de combustibles no está regulado por el Estado, sin embargo los gobiernos inciden sobre el precio a través de YPF, que tiene aproximadamente el 55% de participación en el despacho de nafta y gasoil.
El CEO de YPF, Sergio Affronti, explicó en una conferencia con inversores el mes pasado que el objetivo de la petrolera es mantener los precios de los combustibles constantes en dólares, lo que implica actualizarlos en línea con la variación del tipo de cambio.
El sector de los combustibles no logra salir del estancamiento. En los últimos cinco meses, las ventas crecieron apenas un 6%, luego de un desplome inédito del 44% entre febrero y abril, causado por las medidas de aislamiento que trajo la pandemia, según contaron en la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos (Cecha).
"La crisis del Covid-19 configuró una 'nueva normalidad' de circulación reducida, home office y escuelas cerradas, donde la demanda de combustibles es un 20,4% menor a los niveles pre-pandemia, y que pone en peligro la supervivencia de muchas estaciones de servicio que hoy operan a pérdida", dijeron en la entidad, y estimaron que, de mantenerse este ritmo de crecimiento tan lento de las ventas, recién para diciembre de 2021 se podría volver al volumen de ventas que había previo a la pandemia.
"Somos optimistas y deseamos la recuperación de toda la economía, pero si bien me gustaría venir con mejores noticias, en cuanto a números, la situación sigue igual. Hay una recuperación muy lenta pero que está lejos de los niveles prepandemia. La gente sigue haciendo home office, no llevan a los chicos al colegio, se sale menos a cenar. Eso impacta", sostuvo Gabriel Bornoroni, presidente de Cecha.
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