Salarios e inflación 2024: no se trata de creer o no
Quienes creen que sus sensaciones son mejores que las estadísticas oficiales deberían recomendar cerrar el Indec
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Según el Indec, entre diciembre de 2023 y diciembre de 2024, en promedio los salarios privados no registrados (economía informal) aumentaron 196,7%, los salarios privados registrados subieron 147,5% y los salarios públicos, 119,3%. Dado que, durante el mismo período, en promedio los precios al consumidor aumentaron 117,7%, esto implica una mejora generalizada, aunque dispar, del poder adquisitivo de los salarios, que fue de 36,3%, 13,7% y 0,7%, respectivamente. Nadie que se respete puede creer esto, pero: ¿qué motivos existen para no creerlo?
Al respecto consulté a la norteamericana Phyllis Ann Wallace (1924-1993), nacida en Baltimore. A pesar de tener las mejores notas del colegio secundario, la legislación estadual le impedía a estudiantes “afroamericanos” ingresar a la Universidad de Maryland, pero le proporcionaba financiamiento para estudiar en otros lados. Por consiguiente estudió en la Universidad de Nueva York y en Yale. En esta última universidad se convirtió en la primera doctora de origen afroamericano. Debido a regulaciones del departamento, Yale no la contrató como profesor asistente, aunque sí como asistente de investigación. A partir de 1953 enseñó en la Universidad de Atlanta, y desde 1972 en el MIT. Evelyn Louise Forget indica que Wallace tenía dificultades para asistir a las reuniones anuales de la Asociación Americana de Economía, cuando se llevaban a cabo en ciudades que restringían el acceso de afroamericanos a ciertos espacios públicos, y su protesta influyó para que la reunión de 1958 no se realizara en Nueva Orleans.
–En 1965 usted comenzó a trabajar como jefa de estudios técnicos de la Comisión para la Igualdad de Oportunidades.
–Junto a Orley Ashenfelter, James Heckman, Ray Marshall, Robert Mc Kersie y Lester Thurow trabajamos en la preparación del histórico juicio por discriminación contra AT&T. La experiencia me generó preguntas: ¿podrá lograrse la equidad en materia laboral? ¿Cómo hacen las personas para asignar sus roles laborales? ¿Qué clases de conflictos entre eficiencia y equidad pueden ser tolerados, a medida que diferentes clases de trabajadores son incorporados en el mercado laboral? ¿Cómo pueden minimizarse las actuales manifestaciones de la discriminación sin imponer una carga injustificable sobre los demás? Y, ¿cuáles son los mecanismos internos del mercado laboral que pueden facilitar o entorpecer el logro de igualdad de oportunidades de empleo?
–Las estimaciones oficiales sobre evolución de salarios y precios en 2024 han generado muchísimas dudas. ¿Tienen algún fundamento?
–La gestión de Marco Lavagna al frente del Indec no ha merecido ninguna acusación de “dibujo”, como ocurrió a partir de 2007 con la estimación del índice de precios al consumidor, y todas aquellas variables que usaban a aquel como insumo. Por ejemplo, las líneas de pobreza e indigencia.
–¿Está usted diciendo que todas las dudas son infundadas?
–No, estoy diciendo que dejemos de lado las opiniones ligeras y las conspirativas, a las cuales los argentinos son tan afectos, para concentrarnos en cuestiones metodológicas y en el uso que hay que darles a las estadísticas. Quienes afirman que “no creen en nada de lo que dice el Indec” se la darán de profundos delante de parientes y amigos, pero en general no saben de qué hablan.
–¿Para qué sirven las estadísticas?
–Nadie consulta al Indec para saber si está ocupado o desocupado, o si su empresa importa o exporta más que antes. Se consulta al Indec para saber si lo que le ocurre a uno también le ocurre a muchos. Ejemplo: me quedo sin trabajo. Esto es un hecho. Consulto al Indec para saber si la tasa de desocupación está aumentando, porque en este caso no me sentiré mal en lo personal, pero me volveré pesimista pensando en la probabilidad de volver a conseguir trabajo; mientras que si la tasa de desocupación está disminuyendo, me sentiré mal en lo personal, pero optimista pensando en mi futuro laboral.
–¿Puede uno “sentir” que el Indec está subestimando la verdadera tasa de inflación?
–Puede, pero difícilmente la sensación surja de analizar la totalidad de sus compras. De hecho, cuando alguien le pregunta a quien duda, responde con el precio del producto que más aumentó. Ejemplo: ¿cómo puede ser que el Indec diga que la tasa de inflación fue de 2%, cuando hace unos días pagué 20% más por determinado bien? Además, el Indec mide el promedio del aumento de los precios, pero cuando los alquileres sufren un salto, los inquilinos están peor de lo que dijo el Indec, y los propietarios mejor.
–La estructura de ponderaciones (la “canasta”) que utiliza el Indec para el cálculo del índice de los precios al consumidor se volvió vieja. ¿Puede ser esto causa de subestimación de la verdadera tasa de inflación?
–El Indec estima la tasa de inflación a base de muestras. Con el tiempo aparecen y desaparecen bienes, y también puntos de venta y modalidades de comercialización, lo cual obliga, periódicamente, a actualizar las canastas. Tengo entendido que en esto está el Indec. Desde el ángulo del cambio en los precios relativos y su influencia sobre el consumo de los diferentes productos, deberíamos esperar que el nuevo índice mostrara menos inflación que el viejo. Pero mejor esperar los resultados.
–Las estimaciones oficiales del aumento de los precios al consumidor ¿también generan dudas en otros países?
–Fíjese lo que acaba de ocurrir en el mío. Entre diciembre de 2024 y enero de 2025, en promedio los precios al consumidor aumentaron 0,5%, “nada” para los argentinos, pero un montón en Estados Unidos. Luego de varios meses de haber aumentado 0,2% mensual, la tasa de inflación escaló a 0,3% en noviembre pasado, y a 0,4% en diciembre. Según algunos, esta suba de la tasa de inflación se debió al aumento del precio de los huevos, producto de la crisis aviar. Pregunta: ¿puede ser que en una economía tan grande como la de Estados Unidos, el aumento del precio de los huevos “mueva el amperímetro”?
–¿Adhiere usted a la idea de que las estadísticas son como las bikinis?
–Así es. Se dice que tanto unas como otras, lo que muestran es importante pero lo que ocultan es fundamental. Esta versión es la que hay que mencionarles a los “estadisticomaníacos”, quienes les prestan atención a los decimales. Esto ignora las limitaciones conceptuales y prácticas que tiene toda estimación estadística. A los “estadisticofóbicos” hay que decirles lo contrario: que las estadísticas lo que ocultan es fundamental, pero lo que muestran es importante. Pensar que cualquiera tiene mejores estimaciones que el Indec, de tasa de inflación, línea de pobreza e indigencia, o PBI, suena muy bonito pero no es pensar.
–Doña Phyllis, muchas gracias.