Se mantuvo la fiebre en las góndolas, pero con pocos faltantes

Los supermercados volvieron a vivir ayer otra jornada de fiebre en las góndolas, con ventas que duplicaron o triplicaron a las habituales y largas colas en las puertas de entrada. El panorama se repitió con diferente intensidad en farmacias y autoservicios chinos, ya que los consumidores salieron a stockearse ante lo que se anticipaba como un inminente anuncio de la cuarentena general.

En este contexto, algunas de las preguntas y respuestas en torno a lo que puede pasar con el consumo en los próximos días.

–¿Están preparados los supermercados para hacer frente a esta fiebre de compras?

–Supermercados, mayoristas y proveedores aseguran que esta crisis los agarró bien preparados, con los centros de depósito bien stockeados y con la experiencia aprendida de lo que pasó en España o Italia. "Tomando las experiencias internacionales, ya habíamos empezado a prepararnos para este escenario. La mayoría de las cadenas cambiaron sus criterios de stock, con aumentos en los pedidos y más mercadería en las tiendas", explican en la Asociación de Supermercados Unidos (ASU), la entidad que reúne a las grandes cadenas del rubro.

–¿Qué puede pasar con los autoservicios chinos?

–Excepto algunos lácteos o marcas de cerveza, la mayoría de los productos que comercializan los autoservicios chinos son comprados en los supermercados mayoristas como Vital, Maxiconsumo, Diarco, Makro o Yaguar. Estas cadenas también cuentan con buenos niveles de abastecimiento y en el sector también aseguran que, más allá de algún faltante puntual, no tienen problemas de falta de mercadería. Los altos niveles de abastecimiento de los mayoristas permiten anticipar que los chinos tampoco tendrán problemas generalizados de faltantes.

–¿Qué pasa con los precios?

–Es una de las preguntas del millón. Históricamente, las relaciones entre proveedores y supermercados no estuvieron exentas de rispideces y siempre fueron comunes las acusaciones cruzadas, culpando a un fabricante que quiere pasar una nueva lista de precios con aumentos o que una cadena se está quedando con un descuento o bonificación, lo que implica una suba en forma indirecta. Llamativamente, este tipo de discusiones en los últimos días no fueron generalizadas, aunque sí hubo denuncias contra algunos fabricantes (una empresa de pastas, una láctea, un fabricante de lavandina) que intentaron colar algunos aumentos. En todos los casos, los supermercados elevaron la denuncia ante la Secretaría de Comercio y los proveedores tuvieron que dar marcha atrás con el incremento.

–¿Hasta cuándo se va a mantener este comportamiento casi de pánico por parte de los consumidores?

–Los supermercadistas estaban confiados en que lo peor había pasado el último fin de semana, pero la filtración de que se avecinaba una cuarentena generalizada en las últimas horas disparó la demanda. Ayer se volvieron a ver en las puertas de muchos supermercados largas colas de gente esperando para entrar, ya que la mayoría de las cadenas implementaron un sistema de ingreso restringido a sus tiendas. En el sector confían en que una vez que la cuarentena sea efectiva, la demanda se reducirá en forma notable, repitiendo lo que pasó en otros países. "En España también se vivieron momentos de pánico hasta que se restringió la posibilidad de que la gente saliera a la calle. Hoy los supermercados en Madrid o Barcelona están todos abiertos y bien abastecidos, así que estamos seguros de que acá va a pasar lo mismo", explicaron en una cadena.

–¿Qué va a pasar con los servicios de delivery?

–La idea del Gobierno y de las cadenas de supermercados es mantener todo lo que se llama la última milla del retail, es decir, los servicios de entrega online propios (estilo Coto digital) y también los que ofrecen las aplicaciones como Rappi, Glovo y Pedidos Ya, que tienen acuerdos con las principales cadenas de supermercados.

–¿Qué es lo que más preocupa a los supermercados?

–Al tope de la lista de las preocupaciones, junto con el abastecimiento de las tiendas y el manejo del flujo de clientes, figura el tema transporte. "El transporte público es un punto crítico. No solo para contar con personal en las tiendas, sino también para asegurar que los empleados de las empresas fabricantes puedan llegar a la fábrica y lo mismo con el personal de los centros de distribución", explican en el sector.