Coronavirus: con dudas y euforia, Italia comienza la apertura total de actividades

ROMA.- En medio de gran incertidumbre por lo que vendrá, pero con toda la euforia de volver a empezar, finalmente Italia volverá hoy a reabrir casi todo. Bares, restaurantes, negocios, peluquerías, museos y bibliotecas podrán volver levantar persianas -cerradas desde el 10 de marzo-, por supuesto bajo estrictas medidas de seguridad.

Aunque seguirá estando prohibido trasladarse a otras regiones y las aglomeraciones de personas, la gente ya no necesitará tener un formulario con una autocertificación para salir de su casa y podrá ver libremente a sus amigos, también bajo condiciones de seguridad.

El lunes próximo reabrirán gimnasios; el 3 de junio, las fronteras con la Unión Europea (UE), Suiza y Mónaco, y el 15 de junio, cines y teatros.

Azotada como ningún otro país de Europa por el coronavirus, que se cobró 31.908 vidas y hundió a una economía que ya venía con problemas, si bien el contagio no ha terminado -ayer se detectaron 675 nuevos casos y se registraron 145 muertos en 24 horas, la cifra más baja desde hace más de 2 meses-, el gobierno del primer ministro Giuseppe Conte finalmente optó por la reapertura anticipada del país. Como admitió el premier, aunque es real el riesgo de un ulterior contagio, se trata de un "riesgo calculado". El daño económico de la parálisis sería mucho mayor e Italia no puede permitirse seguir bloqueada, explicó.

No fue fácil para Conte tomar la decisión de reapertura, que llegó después de fuertes peleas con los gobernadores de las 20 regiones del país, que en su mayoría presionaron para que hubiera lineamientos generales no tan severos a la hora de la puesta en marcha de las actividades.

Fiel reflejo de las discusiones por la reapertura anticipada, el gobernador de Campania, Vincenzo de Luca, anunció que hoy allí no reabrirán ni restaurantes ni pubs, explicando que así protegía la salud de los ciudadanos de acuerdo con los recursos sanitarios disponibles, que son escasos en su región.

De Luca denunció "un clima de confusión", que se palpaba ayer en las calles de Roma, donde ya se notaba la relajación absoluta de la gente ante el anuncio de reapertura casi total.

Multitudes volvieron a salir a dar vueltas en parques y plazas. Aunque se recomienda el uso del barbijo sobre todo en sitios cerrados o donde hay mucha gente, pocos llevaban tapaboca.

Mientras se veían comercios que se preparaban para la reapertura de hoy, una conocida peluquería del centro histórico ya había comenzado a atender.