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El huracán Beta llegó a Nicaragua y comenzó a debilitarse
Tocó tierra cerca de Puerto Cabezas; bajó a categoría 1, con vientos máximos de 150 kilómetros por hora
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PUERTO CABEZAS. (Reuters)- El huracán Beta azotaba hoy con fuertes lluvias e intensos vientos la zona selvática de la costa este de Nicaragua, donde tocó tierra esta mañana ya un poco más débil, obligando a miles de personas a permanecer en refugios endebles.
Beta se debilitó hoy a categoría 1, con vientos máximos de 150 kilómetros por hora, dijo el Centro Nacional de Huracanes de Miami. Un cambio de dirección de última hora en la noche salvó a Puerto Cabezas, el segundo puerto de Nicaragua en El Caribe, de un golpe directo.
Este pueblo habitado por unas 30,000 personas albergaba hoy cerca de 50,000 si se suman a los pescadores e indígenas miskitos de remotas caletas y comunidades desperdigadas por la selva que fueron evacuados hacia este puerto.
Pronóstico. Los pronósticos meteorológicos prevén que el huracán se desplace en las próximas horas sobre tierra, cada vez más débil, en dirección oeste suroeste, justo hacia las zonas montañosas del interior del país.
Las autoridades de Nicaragua y Honduras decretaron alertas por inundaciones y aludes causados por las lluvias y temen que si el huracán se interna en tierra podría provocar mortíferos aluviones en áreas montañosas. Ambos países fueron devastados en 1998 por el huracán Mitch, que dejó unos 10,000 muertos.
Las evacuaciones continuaron durante la noche a pesar de los vientos y fuertes lluvias.
Aunque es un ciclón poderoso, el Centro Nacional de Huracanes de Miami dijo que es pequeño y los vientos con fuerza de huracán se extienden hasta sólo 30 kilómetros del centro, mientras que los vientos de tormenta tropical llegan casi hasta los 100 kilómetros.
Se espera que Beta cause lluvias por entre un total de 25-38 centímetros a lo largo del nordeste de Honduras y Nicaragua con máximos aislados de 64 centímetros, además de inundaciones de entre 4 y 6 metros en zonas costeras antes de disiparse posiblemente el lunes.
Antes de azotar Nicaragua, Beta arrancó techos de casas en la isla colombiana de Providencia, que junto a su vecina San Andrés eran el escondite favorito del famoso pirata galés del siglo XVII, Henry Morgan.
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