Los líderes mundiales se reúnen en una ONU paralizada

NUEVA YORK.– Sumida en una parálisis que rememora los tiempos de la Guerra Fría, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) comenzará a escuchar desde hoy a los líderes de unos 120 países que se reunirán para participar de la 67ª Asamblea General sin ninguna expectativa de responder, más allá de las palabras, a los desafíos que enfrenta el mundo.

Siria, envuelta en una guerra civil que puso al descubierto en el Consejo de Seguridad las divisiones entre Rusia y Estados Unidos, será el tema excluyente del cónclave diplomático en el que, como todos los años, habrá referencias al conflicto entre israelíes y palestinos, el programa nuclear de Irán, la latente amenaza del terrorismo y el desafío del cambio climático.

Pero esta vez, a diferencia de la expectativa que había generado el mayor protagonismo de la ONU el año anterior, luego de la "primavera árabe", la intervención en Costa de Marfil y la ofensiva de los palestinos por conseguir su ansiado Estado, nadie espera otra cosa más que discursos cargados de buenas intenciones y vacíos de ideas.

La presidenta Cristina Kirchner, que se dirigirá a la Asamblea por la tarde, volverá a hacer hincapié en el reclamo argentino por la soberanía de las islas Malvinas. La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, abrirá la sucesión de discursos por la mañana. Ambas mandatarias insistirán, además, en la postergada reforma del organismo, cuya estructura aún refleja el equilibrio de poder de 1945.

Más concentrado en conseguir su reelección que en cualquier otra cosa, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, hablará luego de Dilma.

Perfil bajo

Es tan bajo el perfil que la Casa Blanca le imprimió a la agenda de Obama este año que no incluye ni un solo encuentro bilateral. Ni siquiera una reunión con el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, una decisión que le brindó a su rival republicano, Mitt Romney, una nueva línea de ataque para la campaña.

En sus dos primeros discursos ante la ONU, Obama hizo una fuerte defensa del reclamo de los palestinos, llegando, incluso, a condenar los asentamientos de Israel en Cisjordania y en la parte oriental de Jerusalén. En 2011, ya con la reelección y la influencia del poderoso electorado judío en mente, Obama se olvidó de los asentamientos, abogó por la seguridad de Israel y rechazó el pedido de los palestinos de ser reconocidos como un Estado independiente.

Hoy, en su discurso, Obama volverá a intentar responder al desafío de equilibrar los objetivos de política exterior de Estados Unidos con sus aspiraciones políticas.

La amenaza de una guerra con Irán, una ofensiva que aquí algunos reclaman y otros directamente exigen sin tapujos, despuntará de tanto en tanto durante los próximos días. Fundada con la idea de promover el desarrollo y la paz y garantizar el respeto a los derechos humanos, la ONU hasta ahora no ha podido frenar la escalada entre Irán e Israel.

Ayer, el presidente de Irán, Mahmoud Ahmadinejad, derrochó palabras amenazantes para Tel Aviv, a pesar de que el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, le había pedido el día anterior que dejara de lado la retórica incendiaria.

"Creemos que se han encontrado en un callejón sin salida y que están buscando nuevas aventuras para escapar de ese callejón sin salida. Irán no va a ser dañado con bombas extranjeras", dijo Ahmadinejad ayer, al hablar ante periodistas sobre la posibilidad de un ataque israelí por los temores que genera la posibilidad de que Irán logre tener su propia bomba atómica gracias a su programa nuclear.

"Ni siquiera los contamos como parte de ninguna ecuación para Irán. Durante una fase histórica, ellos [los israelíes] representan una mínima perturbación que aparece en la imagen y luego es eliminada", advirtió.

Luego de sus palabras, uno de los voceros de la Casa Blanca, Tommy Vietor, reafirmó el compromiso de Estados Unidos con Israel, uno de los ejes del discurso de Obama el año último, que, se espera, el mandatario reiterará hoy.

Pero quizá como evidencia del peso de la campaña norteamericana, Obama participará también hoy de la Iniciativa Clinton, el encuentro que todos los años organiza la fundación del ex presidente estadounidense Bill Clinton, donde también hoy hablará Romney.

Mientras tanto, los problemas que enfrenta el planeta seguirán su evolución al ritmo de los avatares de la política y la diplomacia global.

Los discursos más esperados

Cuáles son las previsiones de los principales oradores
Hoy

Barack Obama
El presidente norteamericano aprovechará para hablar del liderazgo de su país en el mundo y de los recientes disturbios en los países musulmanes

Dilma Rousseff
La mandataria brasileña defenderá dos pilares de su gobierno: el crecimiento con inclusión social y la vía diplomática para resolver conflictos internacionales

Mañana

Mahmoud Ahmadinejad
Se prevé una retórica incendiaria del presidente iraní, que suele aprovechar las asambleas para defender su polémico plan nuclear y atacar a Israel

Evo Morales
El presidente boliviano abogará por la despenalización de la hoja de coca y reiterará la demanda de obtener una salida al mar.

Jueves
Benjamin Netanyahu
Es probable que el premier israelí afronte una vez más la cuestión de la eficacia de las sanciones a Teherán

Mahmoud Abbas
Tras la solicitud en 2011 para que la ANP sea miembro de la ONU, el líder palestino se limitará esta año a pedir el estatuto de Estado observador no miembro

DEL EDITOR: qué significa.