Obama despidió a Shimon Peres y llamó a reanudar el diálogo de paz

JERUSALÉN.- El mundo despidió ayer al ex presidente israelí Shimon Peres , que fue enterrado en una ceremonia de Estado con la presencia de decenas de delegaciones extranjeras que dio lugar a un contrapunto entre el presidente norteamericano, Barack Obama -que instó a retomar el diálogo con los palestinos- y el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que subrayó su prioridad en las políticas de seguridad como requisito para la paz.

El féretro con los restos mortales de Peres fue sepultado hacia el mediodía en el cementerio del Monte Herzl, de Jerusalén, a unos metros de donde reposa otro Premio Nobel de la Paz, Yitzhak Rabin, el primer ministro asesinado por un judío extremista por su voluntad de acercamiento a los palestinos.

Noventa delegaciones de 70 países asistieron al funeral y homenaje póstumo a un defensor incansable del diálogo de paz como lo fue Peres, donde Obama llamó en su discurso a retomar el legado de uno de los líderes que más trabajó por la convivencia con el mundo árabe en general, y los palestinos en particular.

El presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmoud Abbas, llegó al Monte Herzl luego de seis años sin pisar territorio israelí. En uno de los momentos más significativos de la ceremonia, Abbas y Netanyahu se estrecharon las manos después de seis años, una imagen que dio pie a comentarios sobre las chances de volver a dialogar.

La presencia de Abbas en Jerusalén fue criticada por el movimiento extremista Hamas, que controla la Franja de Gaza y es enemigo declarado de Israel. Al participar en las exequias, Abbas "traiciona la sangre palestina derramada", denunció Hamas. Su partido, Al-Fatah, dijo, en cambio, que era una oportunidad de reivindicar ante el mundo los derechos de los palestinos.

Netanyahu se refirió en su discurso al "espléndido Shimon Peres, un líder de nuestro pueblo, un líder a nivel mundial".

"Israel está dolorido, el mundo lo está -agregó-. Hizo cosas increíbles para garantizar nuestro potencial de defensa, pero en paralelo realizó todo lo posible por alcanzar la paz con nuestros vecinos."

El premier israelí mantuvo reuniones bilaterales con el presidente de Francia, François Hollande, y los cancilleres de Gran Bretaña y Brasil, entre otros invitados. En cuanto a Obama, Netanyahu pareció más bien comunicarse a través de sus respectivos discursos.

Obama comenzó sus palabras con la constatación de que la paz que soñaba Peres sigue siendo una "tarea inacabada". Peres estaba convencido, agregó, de que la seguridad a la que aspira Israel pasa por la paz con los árabes y los palestinos y la creación de un Estado palestino.

"Por supuesto, sabemos que Shimon nunca vio concretado su sueño de paz", dijo Obama. Y luego atribuyó al difunto presidente que "el pueblo judío no ha nacido para gobernar a otro pueblo". Netanyahu había afirmado previamente que la seguridad pesaba antes que la paz.

Fallecido el miércoles a los 93 años, Peres ganó el Nobel de la Paz en 1994 junto con Rabin y el líder palestino Yasser Arafat.

Quien tuvo mucho que ver en aquel entendimiento histórico, el acuerdo más logrado hasta la fecha entre palestinos e israelíes, fue Bill Clinton, que presidió aquella firma que asombró al mundo y que ayer estuvo entre quienes le rindieron honores al difunto presidente.

"Sus detractores le reprochaban seguido ser un soñador ingenuo y exageradamente optimista", dijo Clinton. "Estaban equivocados sólo en lo que concierne a la ingenuidad. Sabía exactamente lo que hacía al ser exageradamente optimista", agregó con emoción.

Homenaje de mil palestinos desde la cárcel

Cerca de mil palestinos que cumplen condena en cárceles de Israel expresaron sus condolencias al gobierno israelí por la muerte de Shimon Peres. Los firmantes de esta inusual iniciativa fueron condenados por ataques contra israelíes u otros delitos relacionados con la seguridad.

Agencias AFP, DPA, EFE y ANSA