VIENA (Reuters).- La hija mayor de una relación incestuosa entre el austríaco Josef Fritzl y la hija que mantuvo encerrada en un sótano por 24 años fue despertada de un coma artificial.
Fritzl mantuvo a su hija Elisabeth encerrada en un sótano secreto y sin ventanas en el subsuelo de su casa donde ella dio a luz a siete de sus hijos. Tres de los niños fueron mantenidos encerrados en el sótano con su madre.
"La paciente Kerstin F. fue sacada de un coma artificial y fue capaz de abandonar hace unos días la unidad de cuidados intensivos", informó el hospital de Amstetten.
"La paciente aún requiere cuidados médicos y terapéuticos intensivos", agregó.
Los doctores pusieron a Kerstin en un coma artificial después de que sufrió episodios de calambres debido a una deficiencia de oxígeno y problemas renales y fue llevada por Fritzl desde el sótano donde estaba cautiva hacia el hospital.
Tres de los seis niños sobrevivientes de la relación incestuosa, cuyas edades van de los 19 a los cinco años, vivieron encerrados en el sótano del hogar familiar en la ciudad de Amstetten, ubicada en la provincia de Baja Austria.
Otros tres fueron criados como propios por Fritzl y su esposa Rosemarie, y uno murió poco después de nacer.
Los fiscales investigan al hombre de 73 años por coerción, violación, incesto y la muerte del bebé, aunque hasta el momento no ha sido acusado formalmente. La policía dice que el hombre admitió ser culpable de retención ilegal e incesto.
El caso se dio a conocer después de que Kerstin, quien había permanecido encerrada con su madre desde su nacimiento, cayó seriamente enferma y fue llevada al hospital por Fritzl.
Medios austríacos reportaron que Kerstin podría haberse reunido con su madre, su abuela y sus hermanos que también se encuentran en el hospital.
Un portavoz del recinto hospitalario no pudo confirmar ésto inmediatamente o proveer mayores detalles.
